Uno de los hábitos que más recomienda la comunidad médica es una práctica de ejercicio constante para lograr obtener un buen estilo de vida en el que cada vez más se fortalezca el sistema inmune y se mantenga un peso ideal.

Y es que esta es una de las costumbres fundamentales que deben realizar las personas día tras día para oxigenar el organismo y el cerebro, y para prevenir diferentes enfermedades como los problemas que atacan al corazón cuando se lleva una vida sedentaria.

De igual manera, es necesario destacar que la actividad física se recomienda practicar en las horas de la maña, dado que, es el momento esencial para activar el cuerpo, eliminar las toxinas represadas del día anterior e iniciar la jornada de la mejor manera posible.

Sin embargo, si resulta imposible hacer ejercicio en las primeras horas del día, es vital que el desayuno esté compuesto por nutrientes y minerales, y no por harinas que se terminan convirtiendo en glucosa para el organismo.

Por ello, el portal Zen recomienda consumir en el desayuno alimentos ricos en proteínas y grasas buenas como, por ejemplo, huevos a la plancha o revueltos en el caso del primer nutriente, y salmón, atún o aguacates en lo que corresponde al segundo ítem.

Asimismo, en esta dieta se pueden incluir lácteos de calidad como el kéfir de oveja o de cabra, que, tienen una función principal y esta es fortalecer la microbiota intestinal. También, se pueden sumar frutos secos o semillas.

Por último, es importante que se incluyan frutas con índices de glucosa baja como la piña y la papaya, que, además de esto, le aportan al organismo enzimas llamadas papaínas que favorecen la digestión.

Alimentación: estos son los productos que aumentan la glucosa en la sangre

En los últimos años se le ha puesto mucha atención al contenido de azúcar de los alimentos que se consumen a diario. Incluso, se ha tratado de concientizar cada vez más a los consumidores, para que tengan en cuenta la cantidad de azúcar que ingieren y la importancia de controlarla para prevenir enfermedades.

Aunque una de las soluciones para disminuir los niveles de azúcar es cambiar los hábitos alimenticios y aumentar la actividad física, en la mayoría de los casos se pierde con facilidad esta buena intención por la falta de constancia frente a al tema.

Estos son los alimentos que aumentan la glucosa en la sangre:

  • Almidón de maíz, mandioca.
  • Pan blanco.
  • Harina de trigo refinada.
  • Azúcar.
  • Miel.
  • Fideos.
  • Mermeladas.
  • Puré de papa.
  • Productos de panadería.
  • Cereales azucarados.
  • Helados.

Algunos alimentos que pueden ayudar a mejorar los niveles de azúcar

La dieta balanceada contribuye en gran medida a mantener los niveles de azúcar justo en su punto. Por eso se recomiendan algunos que se pueden incluir en el régimen alimenticio.

Los brotes de brócoli son fuentes concentradas de glucosinolatos como la glucorafanina, y se ha demostrado que ayudan a promover la sensibilidad a la insulina y reducen los niveles de azúcar en la sangre en personas con diabetes tipo 2. La mejor manera de aprovechar sus componentes es consumirlo crudo o ligeramente cocido al vapor.

Los mariscos, el pescado y los moluscos, ofrecen una valiosa fuente de proteína, grasas saludables, vitaminas, minerales y antioxidantes que pueden ayudar a regular los niveles de azúcar en la sangre.

Las semillas de calabaza contienen gran cantidad de grasas y proteínas saludables, lo que las convierte en una excelente opción para el control del azúcar en la sangre.

Los frijoles y las lentejas son ricos en nutrientes, como magnesio, fibra y proteínas, que pueden ayudar a reducir el azúcar en la sangre.