Las personas de la tercera edad suelen presentar diversos padecimientos que afectan de manera directa la salud de sus huesos, articulaciones o cartílagos. Dichos padecimientos, por lo general, se originan por el desgaste normal de ciertas zonas del cuerpo producto del envejecimiento.

Para prevenir este tipo de molestias es crucial que el paciente se alimente de manera sana y equilibrada durante la mayor parte de la vida. Asimismo, es importante que realice actividad física con frecuencia. En este caso, los ejercicios y las rutinas se deben ir ajustando según la edad y las limitaciones motoras de cada individuo.

Las rodillas son las articulaciones más grandes del cuerpo. | Foto: Getty Images

Cabe mencionar que las afecciones en los cartílagos pueden ser frecuentes también en pacientes con sobrepeso u obesidad, ya que estas zonas tienen que hacer un esfuerzo adicional por sostener el peso de la persona, lo que causa afecciones en las articulaciones y lo que puede generar dolor o inflamación en determinadas partes del cuerpo como las rodillas.

Uno de los padecimientos que más afectan a los cartílagos es la artrosis. Se trata de un padecimiento degenerativo que se presenta en pacientes con edad avanzada y surge cuando el cartílago se desgasta gradualmente. Lo anterior deriva en la disminución de la proyección de los huesos, modificando su estructura.

“En la rodilla, los meniscos que tienen forma de medialuna se encuentran entre los extremos del hueso superior (fémur) e inferior (tibia) de la pierna. Los meniscos protegen la superficie de la articulación de la rodilla y absorben el impacto producido por actividades como caminar, correr y saltar”, señala el portal web Cigna.

El dolor de rodilla puede ser causado por afecciones en el cartílago o por sobrepeso. | Foto: Getty Images

Para contrarrestar esta afección degenerativa, es importante tener buenos hábitos de vida desde temprana edad.

Asimismo, se debe tener una alimentación balanceada, rica en vitaminas y minerales que fortalezcan los huesos y los tejidos del organismo. De hecho, el portal web Salud 180 da a conocer algunos poderosos alimentos que ayudan a mitigar este tipo de lesiones y a fortalecer las articulaciones como la rodillas:

Pescado azul

Este superalimento hace referencia al atún, las sardinas, el bonito, las truchas, las anchoas o el salmón, que contienen colágeno, un elemento que reduce el desgaste articular. Además, constituye una de las fuentes más saludable de omega-3, un nutriente que contribuye a mantener alto los niveles del colesterol HDL (conocido como colesterol bueno), y a reducir los niveles del colesterol LDL (conocido como colesterol malo), reduciendo la incidencia de enfermedades cardiovasculares.

Un pescado azul muy recomendado es el salmón, el cual se destaca por su aporte de fósforo (50 % de la dosis diaria recomendada) selenio, yodo y potasio, así como también de vitaminas B6, B12, D y E, tiamina y niacina.

Espinacas

Este superalimento contiene magnesio, un mineral que se requiere para fortalecer y proteger los cartílagos. Asimismo, este vegetal contiene un antioxidante conocido como ácido alfa lipoico, que ha demostrado reducir los niveles de glucosa, aumentar la sensibilidad a la insulina y prevenir los cambios oxidativos inducidos por el estrés en pacientes con diabetes.

Por otra parte, el bajo consumo de vitamina K está asociado con un mayor riesgo de fractura de huesos, pero este nutriente es importante para la buena salud, ya que actúa como modificador de las proteínas de la matriz ósea, mejora la absorción de calcio y puede reducir la cantidad de calcio que expulsa el cuerpo en la orina.

La espinaca tiene vitaminas y minerales que fortalecen el cuerpo. | Foto: Getty Images

Cerdo

El portal web Kazoku señala que las manitas de puerco son una fuente rica de colágeno y proteína, lo que las convierte en un excelente ingrediente para fortalecer los huesos, las uñas e incluso la piel. Asimismo, son ricas en vitaminas y minerales esenciales como hierro, potasio y calcio. Es decir, son una opción saludable y nutritiva para comer.

“También contienen gelatina, una sustancia que puede ayudar a mejorar la salud digestiva y reducir la inflamación en el cuerpo. Y aunque pueden ser altas en grasas, estas son en su mayoría grasas saludables para el corazón y pueden ayudar a mejorar nuestros niveles de colesterol y prevenir enfermedades cardíacas”, señala el portal en mención.