Las semillas poseen múltiples cualidades para el cuerpo. Como indica un artículo del portal Bien natural, la riqueza de este alimento se encuentra en su composición nutricional, la cual es asociada con características beneficiosas para prevenir las enfermedades cardiovasculares y otras afecciones que alteran significativamente la salud.
Una de las semillas con más beneficios es el ajonjolí, que también se conoce como semilla de sésamo. Esta es una planta originaria de la India y de África que, en sus inicios, se utilizaba para espesar y dar sabor a una gran variedad de platos.
Actualmente, son de las semillas oleaginosas más usadas en la cocina y la repostería internacional, sobre todo la oriental, de acuerdo con la Fundación Española de la Nutrición (FEN). Asimismo, explica que más de la mitad del peso de la semilla es aceite, y el resto son proteínas (18 %) y fibra (8 %). De hecho, las grasas que contiene son insaturadas, con predominio de las poliinsaturadas, y la proteína de estas semillas está formada por 15 aminoácidos distintos, con una elevada proporción del aminoácido esencial metionina.
El portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde indica que “las semillas de ajonjolí contienen fibras solubles y compuestos como la sesamina y los fitoestrógenos, que ayudan a reducir el colesterol LDL, llamado ‘malo’, y triglicéridos en la sangre. Estos, a la vez, aumentan los niveles de colesterol HDL, llamado ‘bueno’; de esta manera mantienen el organismo saludable y previenen enfermedades cardiovasculares como aterosclerosis, accidente cerebrovascular e infarto de miocardio”.
Este portal también señala que esta semilla se asocia con la regulación de la presión arterial, puesto que ayuda a facilitar el flujo de la sangre por los vasos sanguíneos, debido a que contribuye a desinflamarlos. Adicionalmente, según el Portal del Consumidor, el contenido de fibra soluble de las semillas potencia el efecto “cardioprotector y ayuda a controlar la glucosa en sangre”.
Por el lado de los minerales esenciales, se destaca que en las semillas de sésamo se encuentran el magnesio, el potasio, en cantidades considerables. En cambio, tiene un contenido menor de sodio, por lo que va en línea con el modelo de dieta DASH para los hipertensos.
También aporta hierro, esencial para la formación de hemoglobina; zinc, un mineral que forma parte de las enzimas que participan en el sistema inmunitario; calcio, clave para el normal funcionamiento de huesos y dientes; potasio, necesario para mantener la presión arterial en niveles normales; y fósforo, que interviene en la formación de los huesos y dientes y en el metabolismo de la energía.
¿Cómo consumir el ajonjolí?
Hay varias formas de aprovechar las bondades del ajonjolí y obtener todos sus beneficios nutricionales:
Bebida o leche vegetal: Se recomienda batir 100 gramos de semillas de ajonjolí (remojadas previamente en agua durante 6 a 8 horas) con 1 litro de agua. Colar y añadir un endulzante natural si es del gusto del consumidor. Mantener en el refrigerador sin exceder tres días. Se puede consumir varias veces al día.
Molidas o machacadas: Debe molerse solo la cantidad de sésamo que se vaya a consumir en ese mismo momento porque de lo contrario el aceite que contienen pierde sus propiedades y el sabor. Pueden consumirse al natural.
Aceite de sésamo: Se puede usar tanto en la elaboración de platos fríos como aliños de ensaladas. De igual forma puede utilizarse para remedios caseros, para mejorar el estado de la piel, como protector solar o para el cabello dañado o maltratado.