Mantener el corazón en óptimas condiciones es uno de los factores más importantes para cualquier persona del común. Cuidar el órgano vital durante toda la existencia permitirá tener una mejor calidad de vida y hará del envejecimiento un proceso simple y sin mayores complicaciones.
Para que el corazón se mantenga fuerte y funcione de forma correcta es fundamental realizar ejercicio con regularidad, como mínimo tres veces a la semana en rangos que rodean los 30 minutos. Se puede hacer actividad física en un gimnasio comercial, al aire libre o en casa. Además, practicar un deporte es una gran alternativa, ya que, hará de esta acción constante un pasatiempo entretenido.
Adicionalmente, el ejercicio se debe complementar con una alimentación saludable. De la dieta se deben eliminar los productos cargados en azúcar, sodio y grasas dañinas, y se deben añadir en porciones moderadas la gran mayoría de alimentos de origen natural como, por ejemplo, las frutas, verduras, legumbres, cereales, entre otros más.
“Una de las principales causas de defunción a nivel global son las enfermedades cardiovasculares, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). La salud del corazón es un tema que suele preocupar en todas las edades, y con razón, pero especialmente en la vejez. Para tener un envejecimiento activo, saludable y feliz, hay que prestarle atención y aprender a cuidar el corazón”, explica el sitio web Cuideo.
Si el órgano vital no se cuida como debe ser y no se realiza ejercicio ni prevalece una alimentación saludable, los niveles de presión arterial, colesterol y triglicéridos en la sangre estarán muy elevados, lo cual incrementa el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular e incluso, un infarto.
“Cuando las personas hablan sobre las enfermedades del corazón, generalmente se refieren a la enfermedad coronaria, que también se conoce como enfermedad de las arterias coronarias (CHD, por sus siglas en inglés). Este es el tipo más común de las enfermedades del corazón. En la enfermedad coronaria, las arterias coronarias (los vasos sanguíneos que llevan la sangre al corazón) se vuelven más angostas o se tapan. Esto ocurre cuando el colesterol y el material grasoso (llamado placa) se acumulan en el interior de las arterias”, indica sobre este punto el Department of Health and Human Services.
Como se mencionó anteriormente, el consumo frecuente de frutas es de vital importancia para que un órgano como el corazón se mantenga sano. Estos alimentos le aportan una gran cantidad de vitaminas y demás nutrientes al cuerpo, los cuales permiten un adecuado funcionamiento del organismo.
De igual manera, es necesario destacar que las frutas se deben consumir en su propio estado, ya que, en jugos o zumos pierden la mayoría de sus minerales e incrementan su fructosa, azúcar natural, que puede elevar los niveles de glucosa en la sangre.
Ahora bien, hay una fruta en particular que cuando se incluye en la dieta alimenticia con moderación y en su propio estado, le aporta diversos beneficios al corazón. Esta es la pera, así lo reseña la plataforma Libby’s.
“Su contenido en procianidina ayuda a la salud del corazón, dado que, se trata de un antioxidante que disminuye la rigidez en los tejidos cardíacos. Además disminuye los niveles de colesterol malo (LDL) es cual se pega en las arterias. También aumenta los niveles de colesterol bueno (HDL) el cual ayuda al cuerpo a deshacerse del colesterol malo”, afirma.
“Por otro lado, la piel de la pera contiene un importante antioxidante llamado quercetina, la cual beneficia la salud cardíaca al disminuir la inflamación, la presión sanguínea y los niveles de colesterol malo”, concluye.