De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la depresión es un trastorno mental que por lo menos alrededor del mundo el 5 % de personas adultas sufre. La Clínica Mayo explica que esta afección tiene un impacto sobre las emociones y los comportamientos de una persona afectando su calidad de vida.
Es importante hacer una precisión: la depresión no solo son episodios de tristeza, sino que, de acuerdo con el centro especializado, requiere de tratamientos, puesto que no es un trastorno que aparece y desaparece.
De ahí que dentro de los síntomas comunes de la depresión se encuentran la desesperanza, la pérdida del interés por llevar a cabo actividades, insomnio, falta de apetito, sobrepeso y ansiedad sin desestimar el cansancio constante, los pensamientos de muerte, la dificultad de concentración incluso la indecisión.
Por esto, los signos de depresión entre adultos, niños y adolescentes pueden ser distintos según sea el caso, como:
- Adultos mayores: los síntomas de depresión se ven asociados con dolores corporales, alteraciones de sueño y la ausencia en actividades de socialización. Asimismo, la Clínica Mayo asegura que no se puede relacionar con envejecimiento por lo que es importante prestarle atención y darle un debido tratamiento.
- Adolescentes y niños: los menores pueden sentir irritabilidad, el no deseo de socializar, tener un bajo rendimiento académico, apego, constantes preocupaciones, entre otros, según sea el caso. Además, los adolescentes pueden caer en el consumo de drogas, alcohol o un excesivo sueño sin querer salir de su casa.
Enfermedades relacionadas con depresión
La Clínica Mayo señala que es importante tratar la depresión porque, de no ser así, podría derivar en:
- Ansiedad: tal y como lo señala la Clínica Mayo, en algunos casos es un trastorno que abruma a una persona con preocupaciones y miedos intensos en su día a día, interrumpiendo sus actividades cotidianas. Precisa que no aparece repentinamente, sino que puede tener un inicio desde la infancia hasta la vida adulta.
- Sobrepeso: la Organización Mundial de Salud (OMS) lo define “como una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud”.
- Consumo de drogas: el National Institute on Drug Abuse menciona que “en realidad, la drogadicción es una enfermedad compleja, y dejar de usar las drogas usualmente requiere más que buenas intenciones o una gran voluntad”.
Por esto, el National Institute of Mental Health (NIMH) menciona que las personas con depresión tienen mayor riesgo de presentar:
- Alzheimer: según el centro especializado, es un trastorno progresivo, que es causado por demencia que afecta la calidad de vida de una persona. Los adultos mayores suelen padecerlo y los principales signos que se observan es el olvido de fechas o nombres de cercanos. Sin embargo, si eventualmente pasa, no significa que se padezca esta enfermedad neurológica.
- Diabetes: la OMS señala que “es una enfermedad metabólica crónica caracterizada por niveles elevados de glucosa en sangre (...), que con el tiempo conduce a daños graves en el corazón, los vasos sanguíneos, los ojos, los riñones y los nervios”.
- Osteoporosis: según la Clínica Mayo, esta enfermedad afecta los huesos, debilitándolos, causando fracturas por leves movimientos. Explica que estas lesiones son recurrentes en las muñecas, la columna vertebral y la cadera.
Entre tanto, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) puntualiza que “la depresión no es un signo de debilidad. Se puede tratar con terapia o intervención psicológica, con medicación antidepresiva o con una combinación de ambos métodos”.
De ahí que la Clínica recomiende que ante pensamientos suicidas se comuniquen con las líneas de atención que disponen los gobiernos para tratar este trastorno.