De acuerdo con la Clínica Mayo, un ronquido es un sonido fuerte “que se produce cuando el aire pasa por los tejidos relajados de la garganta y hace que estos vibren mientras respiras”. Aunque son considerados comunes, se debe prestar atención porque podrían estar asociados con un problema de salud, por ejemplo, con la apnea obstructiva del sueño (AOS).
De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (MedlinePlus) esta afección relacionada con el sueño suele presentarse cuando la respiración se detiene a causa de las vías respiratorias y su estrechamiento.
Por tanto, los síntomas o signos pueden ser dolores de cabeza, sueño, somnolencia, dolor en el pecho y presión arterial alta, esta última asociada con enfermedades cardiovasculares.
Cabe recordar que la Sociedad Respiratoria Europea (ERS) señaló a través de un estudio que una persona con AOS puede tener mayor riesgo a desarrollar cáncer. Sin embargo, el doctor Andreas Palm, de la Universidad de Uppsala, Suecia, puntualizó que: “ya se sabe que los pacientes con apnea obstructiva del sueño tienen un mayor riesgo de cáncer”, pero no se puede descartar la incidencia de otras complicaciones, incluso la falta de oxígeno.
El estudio se basó en el análisis de datos de 62.811 pacientes que no habían sido tratados para contrarrestar AOS. “Encontramos que los pacientes con cáncer tenían AOS levemente más grave, según lo medido por un índice de apnea hipopnea promedio de 32 versus 30, y un índice de desaturación de oxígeno de 28 versus 26″, dijo el experto.
Palm, destacó que los resultados de la investigación pretenden que los médicos consideren la AOS sin tratamiento, como un índice de riesgo de desarrollo de cáncer, sin pretender generalizar todos los casos.
Asimismo, la Clínica Mayo explica que la apnea del sueño ocurre por una variedad de factores, de los cuales destacan el consumo de alcohol, la estructura de la boca y los senos paranasales, seguido de posibles resfriados y alergias.
Ejercicio ‘antironquidos’
The Sun citando a un profesional de la salud, describe uno a uno los ejercicios que posiblemente podrían evitar o reducir los riesgos de ronquidos, como por ejemplo:
- Mover la lengua de derecha a izquierda: esto para poder relajar los músculos, ya que como se indicó, los de la boca están asociadas con la AOS, y, por tanto, con los ronquidos.
- Empujar la lengua contra los dientes: cerrando la boca y apretando los dientes, se debe presionar la lengua contra ellos. Repetir por lo menos cuatro veces cada sesión.
- Haciendo presión en los músculos de las mejillas: con la ayuda de los dos dedos hacer presión hacia adentro de la boca mientras la lengua empuja las mejillas hacia afuera.
Remedios caseros para combatir los ronquidos
Aunque modificar hábitos es necesario para dejar de roncar, siempre y cuando no esté relacionado con una enfermedad. Ciertamente Mejor con Salud menciona que la menta puede combatir síntomas relacionados con la gripe que desencadenan ronquidos gracias a sus efectos antibacterianos, ya que pueden descongestionar las vías respiratorias.
Según describe el remedio casero, en un vaso de agua se debe agregar gotas de menta. Revolver muy bien para luego consumir.
Además, al igual que la miel, el eucalipto tiene una propiedad expectorante que lo destaca de otras hierbas, mejorando la respiración:
- Hervir 2 tazas de agua.
- Agregar eucalipto y menta.
- Una vez esté en ebullición, bajar del fuego.
- Tapar y dejar reposar por 10 minutos.
- Inhalar el vapor de la mezcla teniendo precaución de no quemar la cara.
Por tanto, es importante consultar con un profesional de la salud para identificar los factores que influyen en los ronquidos, si es por una afección asociada o por una mala postura, puesto que dentro de las complicaciones, la Clínica Mayo asegura que podrían provocar somnolencia y falta de concentración.