Según el Instituto Nacional del Cáncer (NCI), los riñones son órganos que tienen como función eliminar “los desperdicios de la sangre y el exceso de agua”. Asimismo, pueden mantener el equilibrio de sustancias químicas como el potasio, el calcio y el sodio.
En este sentido, al igual que otras partes del cuerpo, suelen presentar complicaciones como hepatitis, hígado graso y cáncer, por lo cual es importante mantener hábitos saludables y medidas preventivas para reducir el riesgo.
“La hepatitis es una enfermedad causada por virus, responsable de altos niveles de morbilidad y mortalidad en todo el mundo. Se estima que el 57% de los casos de cirrosis hepática y el 78 % de los casos de cáncer primario de hígado son causados por los virus de la hepatitis B y C2″, precisa la Organización Mundial de la Salud (OMS).
De ahí que consumir frutas y verduras sea “extremadamente saludable” para el organismo, por lo cual es fundamental diseñar una dieta equilibrada que busque cuidar órganos como los riñones. No obstante, el exceso de algunos minerales puede ser dañino, como el selenio, ¿por qué?
Selenio
De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (MedlinePlus) el selenio es un elemento fundamental para el cuerpo, teniendo en cuenta que: ”las pequeñas cantidades de selenio son buenas para su salud”, lo que quiere decir que su consumo excesivo es perjudicial.
Según precisa, dentro de sus múltiples funciones se encuentra su participación en la producción de proteínas que se llaman “enzimas antioxidantes”, mismas que evitan que haya un daño celular.
La enciclopedia médica también cita algunas investigaciones que mencionan que el selenio puede reducir el riesgo incluso de cáncer, pero asimismo hace una precisión: “Se necesita hacer más estudios sobre los beneficios del selenio”.
La manera más rápida y fácil de obtener este mineral es a través del consumo de pescado, carnes rojas, mariscos, pollo, huevo y ajo, asimismo, de suplementos.
Efectos secundario del selenio para los riñones
MedlinePlus asegura que la falta de selenio no es común, pero sí puede ocasionar la enfermedad de Keshan, que guarda relación con anomalías del miocardio, una parte del corazón. Teniendo en cuenta que las articulaciones también se pueden ver afectadas.
Por otro lado, un consumo excesivo de selenio puede provocar la pérdida del cabello, náuseas, afecciones en las uñas y cambios de humor.
Por su parte, National Institutes Health (NIH) mencionan que el consumo en exceso de selenio también puede desarrollar fallas renales, lo que quiere decir que los riñones dejan de funcionar correctamente. “Por ejemplo, el castaño amazónico (o “nuez de Brasil”) contiene cantidades muy altas de selenio (68–91 mcg por unidad) y podría ser peligroso si alguien come demasiadas”, añade en su hoja informativa.
Es entonces que los síntomas que se presentan tras una insuficiencia renal es picazón, dolores de cabeza, micción escasa, confusión, calambres musculares, entre otros.
“El selenio se encuentra presente en muchos suplementos minerales multivitamínicos y en otros suplementos dietéticos. Se presentan en distintas formas, entre ellas, selenometionina y selenato de sodio”, concluyen los NIH. Asimismo, se recomienda consultar con un profesional de la salud.