El estreñimiento se caracteriza por las deposiciones poco frecuentes o la dificultad para evacuar las heces del cuerpo. Esta anomalía se manifiesta durante varias semanas y puede ser habitual en los niños y bebés. Si bien es cierto los síntomas difieren depende de cada menor, estos inician con el llamado pujo y el enrojecimiento de la piel.

Como confirma la Dra. Aránzazu Recio Linares, especialista en Gastroenterología Infantil y Nutrición de la Unidad de Pediatría y Neonatología del Hospital Universitario Fundación Alcorcón (Madrid), para la revista Hola, “el estreñimiento es un problema frecuente en la infancia y afecta por igual a ambos sexos”. Lo usual es que el recién nacido realice entre 4-6 deposiciones al día, aunque la variabilidad es mucho mayor si se recibe lactancia materna.

A su vez, la doctora Recio asegura que el estreñimiento no puede definirse exclusivamente como un descenso en el número de las deposiciones, puesto que existen otras características como la dureza de las heces o el dolor, que se deben valorar. Aunque sí es cierto que el número normal de deposiciones disminuye con la edad.

Signos de estreñimiento en bebés:

Cuando esto sucede, el pequeño tendrá más dificultad para volver a su estado normal, de ahí que sea preciso acudir al pediatra.

  • Evacuaciones con una frecuencia menor a tres veces por semana.
  • Señales de dolor abdominal: inquietud, llanto y retortijones de estómago.
  • Dificultades al evacuar, el pequeño aprieta los glúteos y se esfuerza más de lo normal durante la evacuación.
  • Deposiciones con heces duras y de gran tamaño.
  • Sangre en la superficie de las heces duras.

Ahora bien, las causas del estreñimiento en bebés pueden variar, pues todo depende de la edad del menor y de su alimentación. Por ejemplo, lo bebes que se alimentan con leche materna pueden no evacuar durante varios días, ya que la leche materna es asimilada fácilmente por el aparato digestivo y no genera tantos residuos como el alimento sólido. En cambio, la leche de fórmula, puede causar estreñimiento y los bebés que la toman son más propenso a sufrir esta afección intestinal.

Así mismo, otras causa del estreñimiento en los bebés es la combinación de la leche materna con alimentos sólidos con poca fibra y la variación de la dieta del bebé.

¿Cómo aliviar el estreñimiento del bebé?

Existen algunas recomendaciones sanitarias que pueden ayudar, aunque lo más recomendable es acudir al pediatra cuando se evidencien los síntomas para tratar de manera adecuada la infección.

  • Hacer masajes en la barriga del bebé, para que su tránsito intestinal mejore. Tan solo hay que hacer una ligera presión en el abdomen del bebé y masajear la zona suavemente en el sentido de las agujas del reloj.
  • El ejercicio también funciona. Si el bebé ya gatea, puede animarse a que lo haga él mismo para que esté más activo.
  • Si ya sigue una alimentación complementaria a la leche con alimentos sólidos, es necesario que sea variada y con más fibra. Intentar evitar los alimentos que fomenten el estreñimiento, como el arroz.
Según expertos, el estreñimiento es un problema frecuente en la infancia y afecta por igual a ambos sexos. | Foto: Europa Press 2022
  • Es importante hidratarse con frecuencia, ya que la deshidratación hace que el organismo absorba y retenga el líquido del alimento del bebé, por ello, los excrementos tenderán a ser más secos.

Cuerpo y Mente, da a conocer algunos alimentos ricos en fibra que pueden ayudar a los menores que sufren de estreñimiento y consumen alimentos sólidos:

Frambuesas: una taza de frambuesas por lo general contienen ocho gramos de fibra, además de otros nutrientes como la vitamina C, que es fundamental para la formación de huesos y dientes del bebé. Expertos aconsejan tomar las frambuesas con yogur, en ensaladas, cereales y batidos.

Peras: aparte de contener altos niveles de fibra, contiene nutrientes como el folato, que es esencial durante el embarazo, en especial durante los primeros meses. Se deben consumir enteras con la piel o también prepararlas caramelizadas al horno como un postre fácil de digerir.

Lentejas: este es uno de los suplementos ideales para el embarazo. Una taza de lentejas contiene casi 15.5 gramos de fibra, además de ser rica en magnesio, vitamina del grupo B y hierro, necesarios para la gestación.

Brócoli: además de ser rico en fibra, contiene hierro y calcio que son unos grandes aliados para un embarazo saludable. Expertos recomiendan consumir una taza de brócoli cada segundo día.