Existe un tratamiento para la piel llamado exfoliación química. Este es un procedimiento que consiste en la aplicación de un químico en la piel para extraer las capas superiores y permitir que crezca piel nuevamente lisa.

Además de ser una alternativa para combatir las arrugas, también puede ayudar a tratar las cicatrices y los cambios de color en la piel del rostro. Para mejorar los resultados es importante repetirlo en varias ocasiones, de acuerdo con la asesoría profesional de un experto en el tema.

Los genes son un factor que provocan el envejecimiento. Getty Images. | Foto: Getty Images

“Una exfoliación química ligera mejora la textura y el tono de la piel y reduce la apariencia de las arrugas finas. Los resultados son sutiles, pero mejoran con tratamientos repetidos. Si te realizas una exfoliación química media, la piel tratada quedará notablemente más suave”, explican los expertos de Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.

Este tratamiento ayuda a mejorar la apariencia de la piel y a lucir un rostro más joven, pues con el paso del tiempo y de otros factores, las arrugas se vuelven cada vez más prominentes.

Es importante que antes de someterse a este tipo de procedimientos se consulte con un dermatólogo para recibir la asesoría profesional adecuada. Asimismo, acudir a centros autorizados para realizar este tipo de procedimientos.

Exfoliación en casa

Mejor con Salud, portal especializado en salud y cuidado personal, señala cómo preparar una mascarilla exfoliante en casa con ingredientes muy comunes. Antes de aplicarla, lo ideal es consultar a un doctor y realizar una prueba de alergia en una pequeña parte del cuerpo.

Los ingredientes necesarios son los siguientes:

  • ½ taza de avena molida (50 g)
  • Leche o yogur, lo necesario para conseguir una pasta algo consistente.
  • 1 cucharada de azúcar (10 g)
Algunas personas recurren a las mascarillas para cuidar su piel. | Foto: Getty Images

Procedimiento

  1. En un recipiente, añadir todos los ingredientes.
  1. Revolver muy bien para un resultado homogéneo.
  1. Limpiar el rostro antes de aplicar la mascarilla.
  1. Aplicar realizando masajes circulares suaves.
  1. Después de varios minutos enjuagar con agua tibia.
  1. Finalizar el procedimiento con una crema hidratante.

Arrugas

La aparición de las arrugas se debe a que, con el tiempo, se disminuye la producción de colágeno, queratina y elastina en el cuerpo. El colágeno es una proteína que tiene como función brindar fuerza y elasticidad a la piel. Esta proteína no solo está presente en la piel, sino también en las uñas, los ligamentos, los huesos y los tendones, de acuerdo con Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Esta proteína tiene una función muy importante en el cuerpo humano. Se encarga de brindar fuerza y elasticidad a la piel. Las diferentes capas de la piel (epidermis, dermis y subcutis) están compuestas por un tejido conectivo, el cual posee varias capas de colágeno.

Con el paso de los años las arrugas se vuelven más visibles. | Foto: Getty Images

Según explica Kidshealth, organización estadounidense sin fines de lucro, el colágeno, además de ser el encargado de ayudar a reforzar los huesos, a que la piel y los tendones se estiren, tiene un papel muy importante en el proceso de curación después que se sufre una lesión.

Existen diferentes opciones para el cuidado de la piel y para mejorar su aspecto (aún más si está afectada con manchas, marcas, etc.). Controlar o disminuir el aspecto de las señales del envejecimiento se puede hacer mediante cremas, sueros, procedimientos y diferentes productos y servicios que el mercado tiene para ofrecer.

Cuidado de la piel

Tener buenos hábitos es vital para tener una piel saludable. Mayo Clinic señala algunas recomendaciones para la salud de cutánea.

  • Protegerse del sol es fundamental para disminuir la aparición de manchas y arrugas.
  • Usar bloqueador solar (los expertos recomiendan 3 veces al día).
  • Evitar fumar, ya que esto daña el colágeno y la elastina (las encargadas de brindar fuerza y elasticidad a la piel).
  • Llevar una dieta saludable.
  • Controlar el estrés.
  • Evitar el uso de jabones fuertes.
  • Humectar la piel (se puede hacer uso de cremas).
  • Tomar agua ayuda a mantener la piel y el cuerpo en general hidratado.
  • Afeitarse con cuidado para no causar irritaciones en algunas zonas del cuerpo.
  • No durar tanto tiempo en la ducha, pues el agua caliente o baños con una duración exagerada eliminan los aceites naturales de la piel.