Casi todas las personas se sienten cansadas o estresadas de vez en cuando, pero en algunos casos el cansancio es extremo y realizar actividades como caminar resulta agotador, por lo que prefieren estar acostadas todo el día. Esto podría ser por el síndrome de fatiga crónica o encefalomielitis miálgica (SFC/EM).
De acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, se desconoce la causa exacta de SFC/EM y puede tener más de una. Por ejemplo, es probable que dos o más causas posibles trabajen juntas para desencadenar la enfermedad.
Los investigadores están buscando entre estas posibles causas:
- Infección: aproximadamente una de cada diez personas que desarrollan ciertas infecciones, como el virus Epstein-Barr y la fiebre Q, van a desarrollar SFC/EM. También se han estudiado otras infecciones, pero no se ha encontrado ninguna causa.
- Cambios en el sistema inmunitario: la SFC/EM se puede desencadenar por cambios en la manera en que el sistema inmunitario de una persona responde al estrés o la enfermedad.
- Estrés mental o físico: muchas personas con SFC/EM han estado bajo estrés mental o físico intenso antes de enfermarse.
- Producción de energía: la manera en que las células dentro del cuerpo obtienen energía es diferente en las personas con SFC/EM que en las personas sin esta afección. No está claro cómo esto está relacionado con el desarrollo de la enfermedad.
De acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, los síntomas del síndrome de fatiga crónica pueden variar de una persona a otra, y la gravedad de los síntomas puede fluctuar de un día para otro, pero los siguientes son algunos de los signos y síntomas:
1. Fatiga.
2. Problemas de memoria o concentración.
3. Dolor de garganta.
4. Dolores de cabeza.
5. Agrandamiento de los ganglios linfáticos del cuello o las axilas.
6. Dolor muscular o articular sin explicación.
7. Mareos que empeoran al pasar de estar acostado o sentado a estar de pie.
8. Sueño no reparador.
9. Agotamiento extremo después de realizar ejercicio físico o mental.
10. Escalofríos y sudores nocturnos.
11. Alergias o sensibilidad a alimentos, olores, sustancias químicas o al ruido.
12. Problemas digestivos, como síndrome del colon irritable.
Hay que señalar que el dolor que sienten las personas con esta afección no es causado por una lesión.
Además, reveló que hay algunos factores de riesgo que incrementan la posibilidad de padecer síndrome de fatiga crónica como quienes tienen entre 40 y 60 años. Asimismo, las mujeres son diagnosticadas con síndrome de fatiga crónica con mucha más frecuencia que a los hombres, pero es posible que simplemente sea que las mujeres son más propensas a informar sus síntomas a un médico.
“El médico debería poder diferenciar la EM/SFC de otras enfermedades mediante un examen médico meticuloso. Esto incluye hacer muchas preguntas sobre los antecedentes de salud del paciente y de sus afecciones actuales, así como de sus síntomas para saber qué tan frecuentes son, qué tan intensos y cuánto han durado”, explicaron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés).
En consecuencia, según los Centros también revelaron que no hay una cura o un tratamiento aprobado para la encefalomielitis miálgica/síndrome de fatiga crónica. Sin embargo, algunos de los síntomas pueden ser tratados o manejados y el tratamiento puede dar alivio de esos síntomas a algunos pacientes, pero no a otros.
Por ende, Medline Plus indicó que algunos tratamientos incluyen una combinación de lo siguiente:
- Medicamentos para reducir el dolor, la molestia y la fiebre.
- Medicamentos para tratar la ansiedad (ansiolíticos).
- Medicamentos para tratar la depresión (antidepresivos).