El aceite de oliva es uno de los productos más consumidos en los hogares, no solo por sus usos dentro de la gastronomía, sino también por su gran cantidad de propiedades para la salud y cuidado del cuerpo, siendo popular entre los remedios naturales que cada vez más personas buscan como una alternativa.
De hecho, según lo señalado por la organización Reproducción Asistida, “el aceite de oliva virgen extra puede ser un aliado natural para la función reproductiva masculina. Además, el efecto antiinflamatorio del aceite de oliva en los órganos reproductores también puede ser beneficioso para la fertilidad”.
Brindándole una alternativa a aquellos hombres que buscan mejorar su fertilidad o que tienen algunos problemas con ella, con el fin de concebir un hijo junto a su pareja.
El secreto de este producto está en sus altas cantidades de ácido oleico, el cual tiene diversos beneficios con respecto a la fertilidad en los hombres, pues al ser un ácido graso monoinsaturado, el cual reduce los niveles de colesterol total y colesterol malo, favoreciendo a los espermatozoides y así mismo la capacidad de engendrar.
Otro de los factores que lo hacen una verdadera mina de oro para aquellos que buscan soluciones naturales, son sus altos niveles de vitamina E, un potente antioxidante que contribuye a evitar los daños que pueden sufrir los espermatozoides por el estrés oxidativo, el cual afecta de manera significativa la integridad del ADN espermático, que el fundamental en dicho proceso.
De acuerdo con los expertos de dicha orgnización citada, este puede llegar a ser más efectivo junto a una dieta mediterránea, que basa sus comidas en el consumo de frutas, frutos secos, legumbres, verduras, cereales integrales, pescado, carne de ave y, por supuesto, el uso de aceite de oliva como ingrediente estrella, estimulndo de este modo la producción correcta de espermatozoides para mejorar la fertilidad.
¿Qué cantidad de aceite de oliva consumir al día?
El aceite de oliva tiene 9 calorías por cada gramo consumido; su consumo es recomendado, pues las grasas saludables son imprescindibles y deben constituir entre el 20 % y el 35 % de la dieta, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“100 gramos de aceite de oliva virgen extra equivalen a cerca de 884 calorías. Las grasas se dividirían en 14 gramos de ácidos grasos saturados, 10 gramos de ácidos grasos poliinsaturados y 73 gramos de ácido grasos monoinsaturados”, explica el portal Business Insider.
En el mencionado portal también aseguran que una sola cucharada de aceite de oliva extra virgen “proporciona aproximadamente el 13 % del valor diario recomendado de vitamina E” y también genera un “9 % del valor diario recomendado de vitamina K”.
En Business Insider aconsejan “consumir al día cerca de 40 mililitros de aceite de oliva virgen extra”, particularmente en su versión cruda para comer pan, en aderezos o ensaladas, también se puede usar para cocinar o freír.
“Según un estudio publicado en el 2013, Estudio Predimed, se ha demostrado que aquellas personas que participaron en el mismo, tras consumir unas 5 cucharadas al día, unos 40 mililitros, tienen “menos riesgos de padecer diabetes; su presión arterial es más baja; presentan menos cuadros de depresión y, sobre todo, tiene menos riesgos de padecer una enfermedad cardiovascular”, señala el portal Aceitel.