Es probable que en algún momento de la vida una persona pueda pasar un momento vergonzoso por cuenta de un gas que aparece en el momento menos esperado. Los gases que suelen ser expulsados de manera esporádica no deberían generar ningún tipo de preocupación, pero ello no aplica en todos los casos.
Los eructos y las flatulencias hacen parte del proceso natural de digestión. Sin embargo, estos pueden ser molestos debido al mal olor que pueden emanar. Los gases deben ser objeto de atención cuando vienen acompañados de hinchazón abdominal que puede interferir en la realización de las actividades cotidianas.
Según el portal especializado en temas de salud, Mayo Clinic, los gases vía oral son la forma natural que tiene el cuerpo de expulsar el exceso de aire que se acumula en el tracto digestivo superior.
“Podrías ingerir exceso de aire si comes o bebes demasiado rápido, hablas mientras comes, masticas chicle, chupas caramelos duros, ingieres de bebidas con gas o fumas. Algunas personas tragan aire como un tic nervioso, incluso cuando no están comiendo o bebiendo”, señala el portal web.
Según Mayo Clinc, existen además otras patologías que pueden contribuir a la aparición de gases de manera excesiva, por ejemplo el reflujo de ácido estomacal o la enfermedad del reflujo gastroesofágico.
“Los eructos crónicos también pueden estar relacionados con la inflamación del revestimiento del estómago o con una infección por Helicobacter pylori, una bacteria que causa algunas úlceras estomacales. En estos casos, los eructos están acompañados de otros síntomas, como acidez estomacal o dolor abdominal”, añade el artículo.
Dentro de las recomendaciones que entregan los expertos para reducir la aparición de gases se encuentra el comer de una manera más lenta, tomarse el tiempo para consumir alimentos sin afán contribuirá que entre una menor cantidad de aire al cuerpo.
Evitar bebidas como el agua con gas y la cerveza, ya que al ser carbonatadas generan la reacción en el cuerpo de generar una mayor cantidad de gases. Fumar también aumenta el ingreso de aire al cuerpo, aire que se puede traducir en eructos.
La otra manera frecuenta de expulsión de gases es la vía anal, según el portal Medical News Today, Las personas despiden gases varias veces al día, algunos estudios indican que una persona puede expulsar este tipo de gases de cinco a 15 veces al día, mientras que otras indican que pueden ser hasta 25 veces.
Una de las condiciones que mayor molestia genera son los gases cuyo olor es insoportable, según el portal especializado, puede ser señal algún problema con el sistema digestivo.
“Los gases malolientes después de comer ciertos alimentos, especialmente los de difícil digestión, son normales. Sin embargo, en otros casos, los gases excesivos o malolientes pueden indicar problemas de salud subyacentes que afectan el sistema digestivo, como el síndrome del intestino irritable (SII)”, señala el sitio especializado.
Además, recomienda incluir remedios naturales en caso de se presenten gases con olores fétidos. Por ejemplo, la menta, muy utilizada para tratar complicaciones gastrointestinales, puede juega un papel fundamental en la lucha contra los gases olorosos, en especial si se consume en forma de aceite.
El jengibre, por otro lado, tiene una extraordinaria reputación a la hora de tratar problemas digestivos. Según Medical News Today, el jengibre ayuda a combatir el estreñimiento y la flatulencia al mejorar la contracción muscular del tracto digestivo.
La hidratación también cumple un papel fundamental a la hora de luchar contra los gases olorosos, una correcta hidratación ayudará a que los desechos circulen con facilidad evitando que las bacterias queden estancadas en el intestino produciendo más gases.
Los expertos de Medical News Today, aconsejan que una persona con flatulencias graves y persistentes consulte a su médico para obtener un diagnóstico adecuado y de estar manera se pueda conocer y evaluar posibles causas, para de esta manera determinar el tratamiento adecuado.