Los gases o flatulencias hacen parte de un proceso natural por el cual los intestinos liberan aire represado en la zona. Desafortunadamente, estos vienen acompañados de sonidos particulares y olores desagradables, situación que puede generar incomodidad en el entorno.
Estas flatulencias se generan a partir de un exceso de gas en el sistema digestivo, así como lo explica el portal experto en temas de salud, Redacción Médica.
“La flatulencia es la presencia de una cantidad excesiva de gas en el interior del aparato digestivo. Este exceso de gas puede producir sensación de hinchazón de tripa (plenitud abdominal), eructos frecuentes o emisión de ventosidades”, explica.
A pesar de que las personas tienen la posibilidad de controlar la expulsión de estos gases teniendo en cuenta el contexto, existe un momento del día en donde es casi imposible controlar los gases, las noches. Al estar durmiendo, el cuerpo puede expulsar flatulencias sin que la persona dormida se dé cuenta, algo muy parecido a los ronquidos.
Estos gases se forman normalmente en los intestinos a medida que el cuerpo digiere los alimentos, además, pueden hacer que la persona se sienta inflada e incluso experimente cólicos o retorcijones en el vientre.
La formación de los gases está asociada al tipo de alimento que el individuo consume, por ejemplo, si come alimentos difíciles de digerir como la fibra. Su desarrollo también aumenta cuando el sujeto ingiere algo que su cuerpo no puede tolerar. Dentro de los casos más comunes figuran la intolerancia a la lactosa.
La formación de gases también está asociada con los siguientes escenarios: consumo de ciertos antibióticos, síndrome del intestino irritable, malabsorción, mala digestión, tragar aire al comer, fumar, consumir bebidas carbonatadas y comer muy rápido.
¿Cómo evitar los gases nocturnos?
El sitio web Salud 180 brinda algunos consejos para evitar los gases nocturnos naturalmente.
- Cenar al menos 2 o 3 horas antes de acostarse.
- Evitar el consumo de alimentos grasosos, pesados o fritos. Es recomendable no comerlos antes de dormir.
- Evitar tomar bebidas con gas.
- No consumir sustitutos del azúcar.
- Mantenerse activo realizando ejercicio regularmente.
- Dedicar el tiempo necesario para comer. No comer rápidamente.
- Comer porciones pequeñas en el día y evitar pocas porciones en grandes cantidades.
- Mantenerse hidratado.
- Intentar tomar una infusión de manzanilla después de cenar y observar si puede ayudar a mejorar la digestión y evitar los gases nocturnos.
La medicina tradicional ofrece múltiples alternativas naturales para controlar la emisión de gases intestinales. Una de estas es el té de hinojo con toronjil, el cual contiene propiedades antiespasmódicas que además de eliminar los gases, disminuye el dolor abdominal que este molesto síntoma causa.
Por una parte, el hinojo tiene propiedades que favorecen la digestión, pues cuenta con efectos diuréticos y además es antiespasmódica, desintoxicante, diurética y carminativa. Del mismo modo, es perfecto para recuperar las fuerzas después de algún deporte de alto rendimiento y combate la halitosis gracias a sus propiedades antimicrobianas.
En cuanto al toronjil, es una hierba conocida por sus propiedades analgésicas que ayudan a aliviar el dolor. Asimismo, el portal web Un Cómo, destaca que es una hierba antioxidante que ayuda a proteger las células y favorece su regeneración. De este modo, la combinación de estas dos plantas medicinales resulta útil para mejorar la digestión y combatir los gases intestinales.
¿Cómo se prepara?
El portal web Tua Saúde da a conocer la preparación de esta infusión que se debe consumir tres veces por día:
Ingredientes:
- 1 cucharada de toronjil
- 1 cucharada de hinojo
- Agua
Preparación: inicialmente se debe colocar el toronjil y el hinojo es una taza de agua hirviendo. Luego, dejar que la infusión llegue a su punto de ebullición para retirar y dejarla reposar por 10 minutos. Pasado este tiempo, proceder a colar y beber sin endulzar.