La diabetes es una enfermedad en la que los niveles de azúcar se elevan en la sangre. El cuerpo produce una hormona llamada insulina que ayuda a que la glucosa entre a las células para suministrarles energía.

Cuando el cuerpo no produce insulina se puede presentar la diabetes tipo 1; mientras que la tipo 2 se origina cuando el organismo no produce o no usa la insulina de manera adecuada. Sin suficiente insulina, la glucosa permanece en la sangre, precisa la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Con el tiempo, el exceso de glucosa puede causar problemas serios como dañar los ojos, los riñones y los nervios. La diabetes también puede causar enfermedades cardíacas, derrames cerebrales y la necesidad de amputar un miembro. De igual forma, las mujeres embarazadas pueden desarrollar diabetes, llamada diabetes gestacional.

Los principales síntomas cuando una persona padece de problemas con el azúcar, según el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de Estados Unidos, se evidencian en aumento de la sed y de las ganas de orinar, incremento del apetito, fatiga, visión borrosa, entumecimiento u hormigueo en las manos o los pies, úlceras que no cicatrizan y pérdida de peso sin razón aparente.

Llevar una dieta saludable es clave para controlar los niveles de glucosa en la sangre. | Foto: Getty Images

Una forma de controlar la diabetes, según la Sociedad de Diabetes de Estados Unidos (ADA, por sus siglas en inglés), es ingerir bebidas con cero calorías o bajas en las mismas. Se puede agregar jugo de limones frescos o de lima para darle un toque refrescante y sin calorías.

De acuerdo a esta información, estas son las opciones de bebidas ideales para las personas que padecen diabetes:

Agua

Cuando se trata de hidratación, el agua es la mejor opción para las personas que padecen esta enfermedad. Esto es debido a que no aumentará los niveles de azúcar en la sangre, los cuales también pueden generar como consecuencia, deshidratación. Tomar suficiente agua puede ayudar al cuerpo a eliminar el exceso de glucosa a través de la orina.

En caso de que a la persona no le guste el agua sola, se puede crear una variedad. Por ejemplo, agregar rodajas de limón, lima o naranja; ramitas de hierbas, como menta, albahaca o bálsamo de limón o triturar un par de frambuesas frescas o congeladas y adicionarlas a la bebida.

Investigaciones han demostrado que el té verde tiene un efecto positivo en la salud general, asegura el portal Healthline. Puede ayudar a reducir la presión arterial y los niveles de colesterol LDL, conocido como dañino. Ese sitio web indica que realizar varias tomas al día puede reducir el riesgo de diabetes tipo 2. Sin embargo, se requiere más investigación. Ya sea que la persona elija el té verde, negro o de hierbas, debería evitar aquellos con azúcares agregados.

Los jugos de vegetales son ideales porque no agregan calorías ni azúcar al organismo. | Foto: Getty Images

Jugo de vegetales

Dado que la mayoría de los jugos de frutas al 100 % tienen casi igual porcentaje de azúcar, se puede probar el jugo de tomate o una alternativa de jugo de vegetales. Una mezcla de hojas verdes, apio o pepinos con un puñado de frutos rojos puede proveer vitaminas y minerales. Sin embargo, es importante contar los frutos rojos como parte de los carbohidratos totales para el día.

Leche baja en grasa

Los productos lácteos se deben incluir en la dieta todos los días, dado que contienen importantes vitaminas y minerales, pero agregan carbohidratos. Lo ideal es elegir las versiones sin azúcar, bajas en grasa o descremadas. También se pueden probar opciones sin lácteos y bajas en azúcar, como leche de coco o nueces fortificadas. Algunas de ellas contienen una mínima cantidad de proteínas.

Café

El portal Healthline indica que el café podría ayudar a reducir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. “Investigadores determinaron que el nivel de riesgo se redujo más para las personas que tomaban de dos a tres tazas al día”, precisa. Los análisis, según este sitio web, aplicaron para los cafés con cafeína y descafeinados. Al igual que con el té, es importante que el café sea sin edulcorante. Agregar leche, crema o azúcar aumenta el recuento de calorías general y puede afectar los niveles de azúcar en la sangre.