Las infusiones de hierbas y otros preparados tienen múltiples beneficios para todo tipo de personas y a todas las edades; sin embargo, hay algunos tés que pueden ser muy provechosos específicamente para quienes padecen diabetes.

Entre los pros que presentan algunos se encuentran el control del nivel de glucosa en la sangre, la reducción de la inflamación y la mejoría en cuanto a la sensibilidad a la insulina.

Sobre todo la regulación del azúcar en la sangre suele ser uno de los principales objetivos en la dieta de una persona diabética, pues es esencial para mantenerse sano y activo, y estas bebidas optimizan ese control de la glucosa para que pueda hacerse de forma saludable y deliciosa.

Además, de acuerdo con la nutricionista Jillian Kubala, del portal Healthline, algunas variedades de té contienen compuestos químicos que combaten el daño celular y reducen la inflamación y los niveles de azúcar en la sangre, lo que las convierte en una gran opción para las personas con diabetes.

Estas son algunas infusiones que pueden ayudar a controlar el nivel de glucosa:

La infusión de canela puede ayudar a disminuir los niveles de colesterol y glucosa en la sangre. | Foto: Getty Images

Té verde

Algunos de los compuestos en el té verde, incluyendo el galato de epigallocatequina (EGCG, epigallocatechin gallate), han demostrado estimular la absorción de glucosa en las células del músculo esquelético, reduciendo, por lo tanto, los niveles de azúcar en la sangre, explica Healthline en su portal web.

Según algunos estudios al respecto, tomar té verde podría ser beneficioso también para la reducción de posibilidades en el desarrollo de diabetes desde un principio. Los investigadores recomiendan beber de tres a cuatro tazas de esta infusión al día, aunque lo recomendable es consultar primero con un nutricionista.

Té negro

Este té está compuesto parcialmente por algunos compuestos químicos como las teaflavinas y tearubiginas, que han demostrado tener efectos antiinflamatorios, antioxidantes y reductores de azúcar en la sangre, por lo que podrían ser de mucho beneficio para las personas diabéticas.

De acuerdo con Healthline, un estudio en roedores sugiere que la ingesta de té negro interfiere con la absorción de carbohidratos al suprimir ciertas enzimas y puede ayudar a mantener los niveles de azúcar en sangre bajo control.

“Un estudio en 24 personas, algunas de las cuales tenían prediabetes, demostró que el consumo de bebidas de té negro junto con una bebida azucarada disminuyó significativamente los niveles de azúcar en sangre, en comparación con un grupo de control”, reza el portal.

Té de canela

La canela es una de las especias más populares en la que han encontrado también estas propiedades antidiabéticas. Algunas personas la consumen en suplementos concentrados para regular, justamente, los niveles de azúcar en sangre, pero hay estudios que muestran que beber una taza de té de canela también puede aportar beneficios.

“Un estudio de 30 adultos con niveles normales de azúcar en sangre demostró que beber 3.5 onzas (100 ml) de té de canela antes de ingerir una solución de azúcar llevó a una disminución de los niveles de azúcar en la sangre, en comparación con un grupo de control”, afirma Healthline.

Los tres mecanismos principales por los que la canela ayuda a reducir los niveles de glucosa son la desaceleración de la liberación de azúcar en la sangre, la optimización del proceso de absorción de glucosa en las células y la potenciación de la sensibilidad a la insulina.

Las plantas medicinales pueden ser una buena opción, pero los expertos recomiendan continuar con la medicación y el control que asigna el profesional de la salud. Foto: GettyImages. | Foto: Gettyimages

Té de manzanilla

Esta infusión es una de las más conocidas en todo el mundo y se ha asociado por mucho tiempo con beneficios para la salud que van desde alivio de dolores menstruales hasta ansiolítico. Además, el té de manzanilla tiene la capacidad de regular saludablemente el azúcar en sangre.

De acuerdo con Healthline, el té de manzanilla “no solo tiene el potencial de optimizar el control del azúcar en sangre, sino que también puede ayudar a proteger contra el estrés oxidativo, un desequilibrio que puede provocar complicaciones relacionadas con la diabetes”.