La glucosa es un tipo de azúcar y es la principal fuente de energía del cuerpo. Además, una hormona llamada insulina ayuda a que la glucosa pase del torrente sanguíneo a las células, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Asimismo, explicó que una cantidad excesiva o insuficiente de glucosa en la sangre podría ser un signo de un problema médico serio.
De hecho, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) indicaron que los niveles deseados de azúcar en la sangre son:
- Antes de comer: 80 a 130 mg/dL.
- Dos horas después de comenzar a comer: Menos de 180 mg/dL.
Adicional, la Asociación Americana de la Diabetes (ADA, por sus siglas en inglés) recomienda exámenes de detección de la diabetes para la mayoría de los adultos a partir de los 45 años y en especial aconseja que se realicen exámenes de detección de la diabetes antes de los 45 años si se tiene sobrepeso y si se tienen factores de riesgo adicionales para la prediabetes o la diabetes tipo 2.
Así las cosas, si tras exámenes médicos se detectan niveles altos de glucosa, hay que tener cambios en la alimentación y el portal Medical News Today recomendó consumir manzanas.
“Los polifenoles presentes en la manzana, tienen acción antioxidante que protegen las células beta del páncreas del daño oxidativo, las cuales se encargan de la producción de la insulina, una hormona que mantiene el equilibrio de la glucosa en sangre, siendo importante para prevenir y tratar la diabetes. Además de esto, esta fruta es rica en fibras que ayudan a que el azúcar de los alimentos se absorba más lentamente, contribuyendo en el control de la glucemia”, explicó el portal portugués de salud, nutrición y bienestar, Tua Saúde.
Información nutricional por 150 gramos de manzana con cáscara
- Energía: 96 calorías
- Proteínas: 0,3 g
- Grasas: 0,75 g
- Carbohidratos: 20,1 g
- Fibras: 3,1 g
- Vitamina A: 6 mcg
- Carotenoides: 39 mcg
- Vitamina E: 0,8 mg
- Vitamina C: 10,5 mg
- Potasio: 210 mg
Respecto al consumo, el portal portugués señaló que pueden ser consumidas al natural o ser usadas para hacer preparaciones, como ensalada de frutas, compotas y vinagretas.
Ahora bien, es relevante señalar que para obtener todos los beneficios, la manzana debe incluirse en una dieta equilibrada y saludable que incluya al menos 400 g (o sea, cinco porciones) de frutas y hortalizas al día; menos del 10 % de la ingesta calórica total debe ser de azúcares libres, menos del 30 % de la ingesta calórica diaria debe proceder de grasas y se deben consumir menos de cinco gramos de sal (aproximadamente una cucharadita) al día y la sal debería ser yodada.
Asimismo, para reducir la glucosa se debe hacer ejercicio las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad, pero las personas se preguntan cuál es la mejor hora para hacer ejercicio y, por tal razón los expertos aseguran que es una cuestión de preferencia, gusto y horarios.
Así las cosas, entre las actividades físicas más comunes se destacan caminar, montar en bicicleta y correr, y todas ellas se pueden realizar con cualquier nivel de capacidad y para disfrute de todos.
De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.