Muchas personas buscan bajar de peso sin hacer dieta, pues es un proceso que lleva tiempo y esfuerzo. Por tal razón, El Confidencial reveló los siete hábitos japoneses para estar delgado sin hacer dieta:
1. Comer alimentos de fácil digestión como pescados blancos, arroz, pollo, frutas y verduras como manzanas, papaya, peras, ciruelas, plátano, sandía, durazno, fresas y zanahoria.
2. Dejar de comer cuando se sienta saciedad y no esperar a sentir llenura.
3. Caminar a diario o hacer yoga sin necesidad de ir al gimnasio, pero sí estar en movimiento.
4. Tener una alimentación basada en el yin y el yang. “Para ello, la comida (generalmente de productos orgánicos y de temporada cultivados de forma local) se divide en cereales integrales, como el arroz integral, la avena, la cebada, el trigo sarraceno o la quinoa (entre el 40 % y el 60 %), frutas y verduras (entre el 20 % y el 30%) y judías y productos derivados (entre el 10 % y el 25 %)”, explicó el portal.
5. Bañarse con agua caliente con temperaturas que oscilen entre los 38 y 42 grado durante 20 minutos, pues ayuda a quemar calorías.
6. Inhalar durante tres segundos y exhalar fuertemente durante siete segundos.
7. Tener buena postura.
Por su parte, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, reveló unos ‘tips’ para bajar de peso e indicó que la base para lograr adelgazar sigue siendo una alimentación saludable, baja en calorías y combinada con un aumento en la actividad física.
Por ello, explicó que para empezar a perder peso se pueden seguir estos consejos:
- Comer al menos cuatro porciones de vegetales y tres porciones de frutas diariamente.
- Reemplazar los granos refinados por cereales integrales.
- Comer cantidades moderadas de grasas saludables, como el aceite de oliva, aceites vegetales, aguacates, nueces, mantequillas de nueces y aceites de frutos secos.
- Reducir el consumo de azúcar tanto como sea posible, excepto el azúcar natural de la fruta. La ingesta diaria de azúcares libres debe ser menos del 10 % de calorías totales, aunque para obtener beneficios de salud adicionales lo ideal sería un consumo inferior al 5 % de la ingesta calórica total.
- Elegir productos lácteos bajos en grasa, carne magra y carne de ave de corral magra en cantidades limitadas.
- Tomar agua, aunque el consumo diario de este líquido es diferente para los hombres y para las mujeres, ya que existen diferencias entre la ingesta, pero por lo general la mayoría de los hombres necesita aproximadamente 13 tazas de líquido al día y la mayoría de las mujeres necesita cerca de nueve.
- Comer lentamente y saborear la comida: es recomendable masticar los alimentos entre 30 y 50 veces por bocado.
- Eliminar el alcohol y los refrescos, porque ambos tienen un alto contenido calórico y para perder peso es clave tener un déficit calórico, que es cuando las personas consumen menos calorías que las que gasta en el día a día.
- Comer cinco veces al día, pero porciones pequeñas para no exceder el consumo de calorías y es importante tener en cuenta que la composición exacta de una alimentación variada, equilibrada y saludable estará determinada por las características de cada persona (edad, sexo, hábitos de vida y grado de actividad física), el contexto cultural, los alimentos disponibles en el lugar y los hábitos alimentarios.
- Desayunar todos los días. Un desayuno saludable puede evitar la ingesta de alimentos de manera frecuente.
- Consumir menos de cinco gramos de sal (aproximadamente una cucharadita) al día. La sal debería ser yodada.
De todos modos, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.