Los riñones son órganos que se localizan en la mitad de la espalda, debajo de las costillas. Según información de la enciclopedia médica MedlinePlus, dentro de cada riñón hay un millón de estructuras pequeñas llamadas nefrones, que se encargan de filtrar los desechos y el exceso de agua de la sangre.

El citado portal reseña que la mayoría de las enfermedades renales ataca los nefrones, causando que los riñones no puedan eliminar desechos. De igual manera, detalla que las causas más comunes están asociadas con problemas genéticos, lesiones o medicamentos.

Otro factor de riesgo por el cual se pueden desarrollar enfermedades renales es la preexistencia de diabetes, presión alta o si un familiar cercano también padece problemas en los riñones.

En el listado de enfermedades que amenazan estos importantes órganos figuran el cáncer, los quistes e infecciones renales. Por esta razón, ante cualquier síntoma sospechoso, es aconsejable acudir a un profesional de la salud para recibir un diagnóstico preciso y definir el tratamiento adecuado.

De acuerdo con el portal Vitónica, existen algunos hábitos que las personas pueden adoptar para prevenir enfermedades renales y, por supuesto, cuidar la salud de los riñones. Uno de ellos tiene que ver con la reducción en la ingesta de sal, pues su consumo excesivo puede derivar en un aumento de la presión arterial y daño renal.

Vale mencionar que la ingesta de sal no deja de ser importante. MedlinePlus explica que el cuerpo utiliza el sodio para controlar la presión arterial y el volumen sanguíneo, además de ayudar a que los músculos y nervios funcionen correctamente. Sin embargo, la contraindicación hace referencia a las cantidades, ya que los excesos suelen ser nocivos para la salud.

En segundo lugar, Vitónica sugiere no basar la alimentación en comida que esté frita, puesto que incide notablemente en el aumento del porcentaje de grasa corporal. El efecto para los riñones implica el riesgo de sufrir hipertensión y daño renal.

En términos alimenticios, la recomendación general se basa en las pautas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para una vida saludable. Por ello, se sugiere priorizar la ingesta de alimentos de origen vegetal, los cuales destacan por su alto contenido de vitaminas, minerales, fibra y fitonutrientes, entre otras sustancias beneficiosas para el organismo.

Otro consejo apunta a evitar el consumo de salsas (como mayonesa, mostaza, kétchup, entre otras), pues presentan un elevado nivel de grasas, azúcares y sal. Una alternativa es optar por las salsas con cero calorías o que sean caseras y tengan menor concentración de grasas, azúcar y sal.

La actividad física también ofrece beneficios para la salud renal, ya que el ejercicio de alta intensidad utiliza el azúcar que está en la sangre al tiempo que elimina el sodio.

Finalmente, Vitónica destaca que el sueño es esencial para la buena salud en general. De hecho, menciona que las personas que no duermen lo suficiente tienen una mayor probabilidad de padecer enfermedades crónicas, como la renal crónica.

Expertos aconsejan llevar una dieta baja en sal y tomar líquidos para prevenir los cálculos renales. Foto: Getty images. | Foto: Getty images

Alimentos que ayudan a mantener los riñones saludables

Aceite de oliva

Este aceite es muy conocido en la dieta mediterránea, recomendada por ser especialmente saludable y rica en ácidos grasos saludables. El consumo de aceite de oliva extravirgen a diario puede reducir el riesgo de padecer problemas renales; además, retrasa los efectos cuando se padece esta enfermedad.

Pescados ricos en omega 3

Al ser rico en ácidos grasos omega-3, los pescados son recomendados para cuidar los riñones, incluso el corazón, pues aumentan el colesterol bueno. Se recomienda especialmente el consumo de salmón, caballa, anchoas, ostras, mejillones, sardinas, rodaballo, bacalao y pargo.

Estos evitan la inflamación crónica y retrasan el progreso de la enfermedad renal.

Fresas

Los frutos rojos, como fresas, bayas, arándanos, frambuesas y moras, son ricas en antioxidantes que reducen la inflamación crónica, problemas que están estrechamente relacionadas con las enfermedades renales.

Clara de huevo

La clara de huevo es rica en proteínas, vitaminas y otros minerales fundamentales para el organismo; además, se recomienda el consumo de esta sola debido a que la yema es rica en fósforo, un mineral que las personas con problemas renales deben evitar.

Ajo

El ajo es un alimento diurético que ayuda a reducir el exceso de agua y sodio en el cuerpo, gracias a esto se pueden mantener limpios los riñones. Mejor con Salud señala que es mejor consumir el ajo crudo en ayunas, puede partirse en porciones pequeñas y tomar junto a un vaso de agua.