El portal web Mujer hoy destaca varios hábitos que ayudan a rejuvenecer el cuerpo y la piel. Según explica, “se ha publicado un estudio científico a tener muy en cuenta, en la prestigiosa revista ‘Circulation’, que pertenece a la sociedad científica más importante de Estados Unidos relacionada con las enfermedades del corazón. Seguir cinco hábitos saludables podría reducir drásticamente el riesgo de enfermedad cardíaca o cáncer y potencialmente agregar más de diez años a su vida”.

Estos hábitos son:

Comer sano

Una alimentación sana es clave para un cuerpo saludable. La Organización Mundial de la Salud insiste en la importancia de una dieta que contribuya a disminuir el riesgo de padecer enfermedades no transmisibles como la diabetes y el cáncer.

“Comer verduras, frutas, cereales integrales, legumbre, pescado, carne de ave y grasas ‘buenas’ de fuentes como el aceite de oliva o los frutos secos. También minimizar el azúcar, la carne roja y disminuir la sal”, recomienda Mujer hoy.

Ejercitarse regularmente

El ejercicio físico regular tiene múltiples beneficios para el cuerpo humano. Dentro de estos se destaca que ayuda a disminuir los síntomas de depresión y ansiedad y mejorar el bienestar general.

Cuando se habla de actividad física no es solo ir a un gimnasio. El ejercicio es “cualquier movimiento corporal producido por los músculos esqueléticos, con el consiguiente consumo de energía. La actividad física hace referencia a todo movimiento, incluso durante el tiempo de ocio, para desplazarse a determinados lugares y desde ellos, o como parte del trabajo de una persona”, explica la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, señala que el ejercicio físico puede contribuir a prevenir o combatir algunas afecciones de salud como:

  • Accidente cerebrovascular
  • Síndrome metabólico.
  • Presión arterial alta
  • Diabetes tipo 2
  • Depresión
  • ansiedad
  • Muchos tipos de cáncer
  • Artritis
  • Caídas

Antes de empezar a ejercitarse es recomendable consultar a un médico, especialmente si se tiene alguna enfermedad o condición de salud específica.

Mantener un peso saludable.

Mantener un peso saludable es clave para evitar complicaciones de salud. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) menciona algnunas:

  • Presión arterial alta (hipertensión)
  • Colesterol LDL alto, colesterol HDL bajo o niveles altos de triglicéridos (dislipidemia)
  • Diabetes tipo 2
  • Enfermedad coronaria
  • Ataque o derrame cerebral
  • Enfermedad de la vesícula
  • Osteoartritis (descomposición del cartílago y el hueso dentro de una articulación)
  • Apnea del sueño y problemas respiratorios
  • Varios tipos de cáncer
  • Baja calidad de vida
  • Enfermedad mental como depresión clínica, ansiedad y otros trastornos mentales.
  • Dolor corporal y dificultad con el funcionamiento físico.

La Organización Mundial de la Salud explica cómo los doctores conocen si se tiene sobrepeso u obesidad. “El índice de masa corporal (IMC) es un indicador simple de la relación entre el peso y la talla que se utiliza frecuentemente para identificar el sobrepeso y la obesidad en los adultos. Se calcula dividiendo el peso de una persona en kilos por el cuadrado de su talla en metros (kg/m2)”.

No fumar

Fumar tiene efectos negativos en la salud de las personas, uno de los más graves: cáncer de pulmón. Este hábito es el factor de riesgo más importante para padecerlo.

Algunos de las consecuencias de esta práctica son:

  • Exceso de placa dental.
  • Mal aliento.
  • Arrugas prematuras.
  • Prominencia de arrugas en los labios y ojos.
  • Fumar incrementa el riesgo de padecer psoriaris.

De acuerdo con Taylor Hays, M.D., experto de Mayo Clinic, fumar es un factor que puede incrementar el proceso de envejecimiento natural de la piel, contribuyendo a la formación de las famosas “patas de gallo”, líneas de expresión y un tono de piel grisáceo.