La aparición de canas puede ser un motivo de preocupación en muchas personas, sobre todo cuando se presentan de forma prematura. Más allá de las inquietudes estéticas, pueden ser una medida de cómo se encuentra la salud de una persona.

La Aarp, conocida como la American Association of Retired Persons de Estados Unidos, señala que las canas pueden producirse a raíz de múltiples factores que deben tenerse en cuenta para tomar decisiones que mitiguen su aparición.

“Para la mayoría, la aparición de canas es una parte ineludible de envejecer. Las primeras hebras canosas parecen aparecer alrededor de los 35 años para muchos, y no es raro ver que para los 50 la mitad del cabello ya está gris”, indica la Aarp.

Y añade que si bien es un signo que está asociado al envejecimiento de las personas, la evidencia científica no ha demostrado que las personas que tienen más canas puedan morir más pronto que el resto de la población.

Las canas también dependen de cada tipo de cabello. La fuente citada menciona que en cada folículo piloso, que son las cavidades desde donde salen los pelos, hay unas células llamadas melanocitos, los cuales a su vez son productores de pigmentos que determinan el color de cada cabello.

En las personas que tienen cabello oscuro se encuentra un pigmento conocido como eumelanina, mientras que en los pelos más claros se encuentra la feomelanina.

Los melanocitos están presentes en los folículos pilosos y determinan el pigmento del cabello. | Foto: GettyImages

“Los pigmentos que se producen en el cabello normalmente tardan más en degradarse, lo que permite que el pelo mantenga su color a medida que crece durante un promedio de 3.5 años”, detalla la Aarp y agrega que así lo determinó una investigación publicada en la revista científica Skin Appendage Disorders.

Tal vez uno de los factores que más pesa en las personas que tienen canas desde jóvenes es la genética. La Aarp hizo referencia a otro estudio que salió a la luz en 2016 en la prestigiosa revista Nature Communications. Los investigadores encontraron que, en efecto, hay un gen conocido como factor cuatro, regulador del interferón que está asociado a la producción y el almacenamiento de la melanina.

Las canas aparecen naturalmente con el paso de los años. | Foto: Jamie Grill Photography

Pero la buena noticia es que los asuntos genéticos no son los únicos que inciden en la aparición de las canas.

Otra investigación científica recogida por la Aarp da cuenta de que hay ciertos hábitos alimenticios que pueden favorecer el encanecimiento de los pacientes.

También hay evidencia científica creciente que muestra la asociación entre el consumo de bebidas alcohólicas y tabaco con la aparición temprana de canas. Esto fue documentado, por ejemplo, en un estudio que fue publicado en Indian Dermatology Online Journal y “halló que entre los 207 participantes del estudio, los fumadores tenían un riesgo sustancialmente más alto de encanecimiento prematuro que los no fumadores”, según la Aarp.

Si bien la organización estadounidense explica que los investigadores no lograron explicar por qué los fumadores tuvieron más encanecimiento que los no fumadores, consideraron que podría deberse a los efectos oxidativos.

Algo similar pasa con el estrés. Algunos experimentos en animales han mostrado que someterse a situaciones estresantes puede acelerar el encanecimiento, por lo cual es importante implementar actividades que promuevan la relajación y el buen manejo de circunstancias tensas.

Por último, detalló que varios científicos de la Clínica Mayo en Rochester, Minnesota (Estados Unidos), encontraron que podrían revertirse algunas causas que producen la aparición temprana de canas. Y, de hecho, mencionan factores como la deficiencia de la vitamina B12, también asociada con la anemia.

Las personas vegetarianas pueden ser más proclives a tener canas prematuramente. | Foto: Getty Images

En esa medida, consumir niveles suficientes de vitamina B12 puede ser una medida clave para reducir el riesgo de encanecimiento temprano.

“La vitamina B12 se encuentra naturalmente en alimentos de origen animal, como pescado, carne, aves, huevos, leche y productos lácteos. La vitamina B12 generalmente no está presente en los alimentos vegetales. Los cereales fortificados para el desayuno son una fuente disponible de vitamina B12. Para los vegetarianos, hay más disponibilidad de esta vitamina para el cuerpo en estos cereales. Algunos productos nutricionales de levadura también contienen vitamina B12″, señaló MedlinePlus, la enciclopedia virtual de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.