La enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia entre las personas mayores. La demencia, en concreto, es un trastorno cerebral que afecta gravemente la capacidad de una persona de llevar a cabo sus actividades diarias.
Juebin Huang, médico del Department of Neurology, de University of Mississippi Medical Center, señala que la enfermedad de Alzheimer es una afección progresiva, con una pérdida inexorable de la función mental, caracterizada por la degeneración del tejido cerebral, la acumulación de una proteína anómala denominada beta-amiloide y el desarrollo de ovillos (marañas) neurofibrilares.
Un signo precoz de la enfermedad es el olvido de acontecimientos recientes, seguido de confusión, deterioro de funciones cognitivas y problemas para usar y comprender el lenguaje, así como realizar las actividades cotidianas.
Cabe resaltar que el Alzheimer suele comenzar después de los 60 años y el riesgo aumenta a medida que la persona envejece. Incluso, el riesgo es mayor si hay personas en la familia que tuvieron la enfermedad, según el portal de salud Medlineplus.
Ahora bien, una mala alimentación puede generar depresión, ya que el cerebro y el intestino tienen su origen en las mismas células del embrión y permanecen conectados a medida que el ser humano se desarrolla.
Incluso, entre el 90 % y el 95 % de la serotonina, un neurotransmisor relacionado con la regulación del apetito y otras funciones se produce en el intestino, por lo que existe una gran relación entre lo que se come y el cerebro, según el portal especializado en salud SuMedico.
¿Cuáles son los mejores alimentos para el cerebro según Harvard?
Uma Naidoo, psiquiatra nutricional y profesora de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard en Estados Unidos señala los mejores alimentos para el cerebro:
Verduras de hoja verde
- Contienen vitamina E, carotenoides y flavonoides, que son nutrientes que protegen contra la demencia y el deterioro cognitivo.
- Otro beneficio de estos alimentos es que son una gran fuente de folato, una forma natural de vitamina B9 que es importante en la formación de glóbulos rojos.
Chocolate amargo
Aguacates
- Contienen cantidades relativamente altas de magnesio, que son importantes para el funcionamiento del cerebro.
- Existen diferentes análisis que sugieren que la depresión está relacionada con la deficiencia de magnesio.
Nueces
- Tienen grasas y aceites saludables que el cerebro necesita para funcionar bien, junto con vitaminas y minerales esenciales.
Alimentos fermentados
- Existen una gran variedad de alimentos fermentados y estos se elaboran combinando leche, verduras u otros ingredientes crudos con microorganismos como levaduras y bacterias.
- El yogur natural es uno de los alimentos fermentados más conocidos y lo que tienen en común es que son fuentes de bacterias vivas que pueden mejorar la función intestinal, disminuir la ansiedad y proveer varias ventajas cerebrales.
Cúrcuma y azafrán
- La curcumina es el ingrediente activo de la cúrcuma y puede disminuir la ansiedad al cambiar la química cerebral y proteger el hipocampo.
- Otra especia que la especialista recomienda es el azafrán, que tiene efectos en el trastorno depresivo mayor. Estudios han demostrado que consumir azafrán reduce significativamente los síntomas del paciente afectado por el trastorno.