El cuidado de la salud es fundamental todos los días, pues pueden presentarse afecciones y malestares complicados de manejar. Es de vital importancia prestarle atención a los síntomas del cuerpo, ya que pueden ser base para identificar alguna enfermedad o problema interno.
En ocasiones, debido a la falta de movilidad, de actividad y de buena alimentación, se puede generar un lío como la retención de líquidos. Esta condición puede desencadenar daños a futuro, por lo que se debe atender de distintas maneras.
Según se conoce, la retención de líquidos, también resaltada como edema, se presenta cuando hay un aumento en el volumen del líquido intersticial, es decir, una acumulación excesiva de líquidos en los tejidos. Normalmente, esta situación suele evidenciarse en los pies, tobillos y piernas, pero puede afectar a todo el cuerpo.
La Fundación Española del Corazón explica que entre los síntomas más comunes se encuentran el aumento de peso inexplicable, la hinchazón en las piernas y los tobillos, el aumento del perímetro abdominal y la presencia de hoyuelos en la piel, también conocido como fóvea. Además, también puede registrarse una sensación de pesadez en las piernas.
Ante esta situación, la cual se presenta en distintos casos, se recomienda asistir donde un especialista o acceder a remedios caseros que puedan ayudar a mejorar los síntomas. Una de las alternativas son las plantas y hierbas medicinales, las cuales brindan beneficios positivos y saludables.
Uno de estos ejemplos es el diente de león, una planta que crece con facilidad en climas templados y con el paso de los años se le han dado diversos usos para el cuidado del organismo. En la medicina tradicional es utilizada para tratar problemas estomacales, dolores articulares, infecciones virales y dérmicas, entre otras afecciones.
Según el sitio web Nutrición y Farmacia de España, esta hierba tiene propiedades diuréticas, es antianémica, antioxidante, posee características alcalinas, insecticidas y fúngicas, además de que se le atribuyen bondades antibacteriales. Esto se debe a su riqueza en fibras, vitaminas A, B, C y D, proteínas y minerales, incluyendo potasio.
El nombre de diente de león con el que popularmente se conoce se debe a la forma de sus hojas recortadas, que se asemejan a dientes agudos y curvos. Sin embargo, otros nombres hacen referencia a sus propiedades, precisa el portal de salud Mapfre. Así, el castellano taraxacón o el italiano tarassaco vienen de su nombre en latín Taraxacum que quiere decir “remover” y hace alusión a sus propiedades laxantes.
De acuerdo con Mayo Clinic, esta planta es muy buena para tratar problemas de retención de líquidos, pues es depurativa y se convierte en buen aliado para eliminar líquidos y toxinas, favoreciendo a los riñones y la purificación de la sangre.
Las mejores opciones van de la mano de infusiones y tés, los cuales recogen los nutrientes y propiedades necesarios para aliviar esta molestia que se presenta en las extremidades. Para elaborar una bebida con esta planta tendiente a cumplir con este objetivo se requiere de una cucharadita de hojas secas de diente de león y una taza de agua.
Se calienta el agua hasta que llegue a punto de ebullición, se agregan las hojas en una taza y se vierte el agua caliente sobre ellas. Se tapa y se deja reposar durante cinco a 10 minutos; posteriormente, se cuela el té y se agrega miel o limón al gusto y estará listo el remedio para consumir. Puede ingerirse un par de veces al día y la recomendación es no exceder su consumo.
El portal Dos Farma, por su parte, dice que esta hierba contiene un importante porcentaje de agua y un bajo contenido en carbohidratos y grasas. En consecuencia, es ligera y poco calórica. Estas cualidades la hacen idónea para quienes pretenden perder peso o realizan dietas para adelgazar y sus beneficios se obtendrán en el marco de una dieta saludable y equilibrada.