El sistema circulatorio está formado por vasos sanguíneos que transportan la sangre desde y hacia el corazón, de acuerdo con el portal de salud KidsHealth.
Sin embargo, algunas personas tienen problemas de circulación y algunos síntomas son: fatiga, edema, mareos, dolor de cabeza, manos y pies fríos, dolor en las piernas, calambres musculares, latidos cardíacos irregulares, pérdida de cabello y sequedad de la piel, entumecimiento u hormigueo en partes del cuerpo, entre otras.
Además, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explicó que los factores de riesgo de las enfermedades vasculares pueden variar, pero los más comunes son:
- Edad: el riesgo de contraer algunas enfermedades aumenta a medida que se envejece.
- Condiciones que pueden afectar el corazón y los vasos sanguíneos, como la diabetes o el colesterol alto.
- Antecedentes familiares de enfermedades vasculares o cardíacas.
- Infección o lesión que daña las venas.
- Falta de ejercicio.
- Embarazo.
- Estar sentado o parado por mucho tiempo.
- Fumar.
Por ello, si se presentan problemas de circulación y en especial en las piernas, el diario español Mundo Deportivo reveló que la castaña de Indias es ideal para mejora la circulación de las piernas, ya que posee propiedades antiinflamatorias.
Sobre la misma línea, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar ‘Tua Saúde’ señaló que “la castaña de Indias ayuda a combatir la mala circulación debido a su propiedad venotónica, aumentando la presión natural de la vena. Además, ayuda a disminuir la fragilidad y permeabilidad de los vasos, y es un excelente vasoconstrictor, lo cual previene accidentes venosos”.
Adicional, explicó que “las semillas de la castaña de Indias contienen escina, una sustancia capaz de reducir la hinchazón de las piernas y ayudar a aliviar la sensación de piernas pesadas, que son síntomas de mala circulación”.
Respecto al consumo, el portal portugués indicó que “la castaña de Indias puede ser consumida en forma de cápsulas, las cuales deben ser tomadas de acuerdo a la orientación médica, también puede encontrarse en polvo u hojas que se utilizan para preparar tés o infusiones, o en pomadas y jabones para aplicar en la piel las cuales contienen esta semilla”.
De todos modos, antes de consumir algún alimento lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.
Por su parte, Por su parte, otras recomendaciones para mejorar la circulación sanguínea, según Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación y MedlinePlus, son:
1. Hacer ejercicio: Las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad, y un promedio de 60 minutos al día para los niños y adolescentes.
2. Dejar de fumar. A los 20 minutos de haber dejado de fumar, la presión arterial y la frecuencia cardíaca se recuperan del pico inducido por el cigarrillo. A los tres meses de haber dejado de fumar, la circulación sanguínea y la función pulmonar comienzan a mejorar. Dentro de un año de haber dejado de fumar, el riesgo de padecer una enfermedad cardíaca es la mitad que el de un fumador.
3. Reducir los niveles de colesterol y presión arterial, si es necesario.
4. Consumir alimentos bajos en grasas saturadas.
5. Programar y asistir a las revisiones médicas con regularidad.
6. Practicar yoga, porque al combinar posturas físicas, ejercicios de respiración y meditación mejora la salud en general.