Existen diferentes remedios caseros como el té verde, el té de alcachofa o el jugo de melón con menta que pueden ayudar en el tratamiento del hígado graso, contribuir a la disminución de los niveles de colesterol malo y de triglicéridos en la sangre y que además pueden regenerar las células del hígado, manteniéndolo saludable.
Además de consumir este tipo de bebidas, es fundamental evitar la ingesta de alcohol y tabaco, pues son factores que empeoran la salud del hígado. A su vez, la persona debe evitar los alimentos procesados, ricos en grasas saturadas y azúcares refinados, y aumentar el consumo de frutas, verduras y alimentos ricos en fibra. El tratamiento del hígado graso requiere de un enfoque integral y la supervisión médica es esencial para lograr una recuperación efectiva.
A su vez, es importante tener en cuenta que los remedios caseros deben utilizarse solo para complementar el tratamiento indicado por el médico, el cual normalmente incluye el uso de medicamentos, una dieta balanceada con poca o ninguna cantidad de grasa y ejercicio físico regular.
Los principales remedios caseros para el hígado graso son:
Té verde
De acuerdo con el portal tuasaude.com, “algunos estudios demuestran que el té verde, conocido científicamente como Camellia sinensis, posee compuestos fenólicos en su composición, como la epigalocatequina, que tiene propiedades antioxidantes, ayudando a disminuir el colesterol malo y los triglicéridos, que pueden acumularse en el hígado y empeorar el grado de hígado graso”.
El consumo de té verde puede ayudar a reducir las enzimas del hígado, ALT y AST, que normalmente se encuentran aumentadas cuando hay grasa en el hígado.
Ingredientes
- 1 cucharada de hojas de té verde o 1 bolsita de té verde;
- 1 taza de agua hirviendo.
Modo de preparación
Agregar las hojas o bolsita de té verde en la taza con agua hirviendo y dejar reposar durante 10 minutos. Colar o retirar la bolsita y beber a continuación. Este té puede consumirse de 3 a 4 veces al día o de acuerdo a la orientación del médico.
Té de cardo mariano
Healthline.com aseguró que “un buen remedio casero para el hígado graso es el té de cardo mariano, cuyo nombre científico es Silybum marianum, ya que esta planta contiene propiedades astringentes, que facilitan la digestión, estimulan el apetito y alivian síntomas como pérdida de apetito, mareo y vómitos causados por esta enfermedad”.
Ingredientes
- 2 cucharadas de semillas de cardo mariano;
- 2 tazas de agua.
Modo de preparación
Colocar el agua a hervir y luego añadir las semillas de cardo mariano. Dejar reposar durante 15 minutos, colar y beber 30 minutos antes de las comidas.
Jugo de melón y menta
La menta es una planta medicinal muy utilizada para tratar problemas digestivos, ya que posee sustancias amargas que ayudan a revitalizar la salud del hígado y de la vesícula, aliviando síntomas como mareos y la hinchazón abdominal.
Además de esto, cuando se añade el melón, resulta en un jugo muy refrescante y sabroso que ayuda a mantener hidratado al organismo.
Ingredientes
- ¼ de melón;
- 1 puñado de menta.
Modo de preparación
Debe añadir los ingredientes en la licuadora y batir hasta obtener una mezcla homogénea y con pequeños trozos de menta. Si es necesario, puede incluir un poco de agua para que el jugo quede un poco más líquido. Por último, puede beber el jugo recién preparado.
Té de fenogreco
El fenogreco, cuyo nombre científico es Trigonella foenum-graecum, contiene un aminoácido conocido como 4 -hidroxiisoleucina, que permite disminuir los valores de glucosa, colesterol y triglicéridos en la sangre. Por lo que es posible potenciar el efecto del tratamiento médico, aliviando más rápido los síntomas.
Ingredientes
- 25 gramos de semillas de fenogreco.
Modo de preparación
Primero debe pulverizar las semillas en la licuadora o comprar las semillas ya pulverizadas. A continuación, añadir en jugos, sopas o ensaladas a lo largo del día.
Esta planta no debe ser utilizada por embarazadas o durante el período de lactancia.