Las hierbas son elementos de origen vegetal que los seres humanos han implementado desde años ancestrales por sus propiedades curativas. Su capacidad para prevenir y combatir ciertos tipos de enfermedades o afecciones las transformaron en una de las principales opciones en la medicina alternativa.
Existen muchos tipos de plantas o hierbas medicinales y la gran mayoría de ellas cuenta con una similitud relevante, pues su preparación y consumo se suele presentar de un mismo modo, en té o infusión.
Su elaboración es muy sencilla, para ello solo se requiere de una cantidad de agua determinada, una olla y la planta elegida. Es oportuno resaltar que su ingesta no debe incluir azúcar ni edulcorantes artificiales, pues estas sustancias echan a perder los beneficios de las hierbas.
Las hierbas medicinales son tan importantes para el organismo que hay una de ellas que resalta entre las demás porque tiene la capacidad de combatir una afección como el hígado graso, pues limpia este órgano. Antes de conocerla, es importante abordar este trastorno tan común.
“Enfermedad del hígado graso no alcohólico (NAFLD) es un término general para una variedad de afecciones hepáticas que afectan a las personas que beben poco o nada de alcohol. Como su nombre lo indica, la característica principal de la NAFLD es el exceso de grasa almacenada en las células hepáticas”, explica el portal de investigación Mayo Clinic.
Además, la entidad agrega: “La NAFLD es cada vez más ordinaria en todo el mundo, especialmente en los países occidentales. En los Estados Unidos, es la forma más común de enfermedad hepática crónica, y afecta aproximadamente a una cuarta parte de la población. Algunos individuos con NAFLD pueden desarrollar esteatohepatitis no alcohólica (NASH), una forma agresiva de enfermedad del hígado graso, que se caracteriza por la inflamación del hígado y puede progresar a cicatrización avanzada (cirrosis) e insuficiencia hepática”.
Los principales síntomas de esta enfermedad son una fatiga constante y un fuerte dolor en la parte superior derecha del abdomen. Cuando la cicatrización ya está avanzada, las señales son inflamación abdominal, vasos sanguíneos agrandados, palmas rojas, y color amarillento en la piel y en los ojos.
Ahora bien, como se mencionó, hay un té o infusión natural que ayuda a combatir el hígado graso, dado que depura este órgano tan importante. Esta bebida se prepara con una hierba medicinal muy conocida, la alcachofa.
“Es muy conocida por ser de gran ayuda para adelgazar, pero también para depurar el organismo de toxinas y residuos. Estas últimas son propiedades igualmente beneficiosas para el hígado graso o esteatohepatitis no alcohólica porque ayudan a limpiarlo, siendo uno de los mejores remedios naturales que se puede emplear para este fin”, afirma el sitio web UnCOMO, publicado a través de Mundo Deportivo.
Según Tua Saúde, así se prepara.
Ingredientes:
- 1 cucharadita (5 gramos) de hojas secas de alcachofa.
- 1 taza de agua hirviendo.
Procedimiento: para preparar el té o infusión con esta hierba se deben colocar las hojas en la taza de agua hirviendo. Luego, se deja reposar de 5 a 10 minutos, para poder colar y beber.
De igual manera, es necesario destacar que el té o infusión de alcachofa se debe consumir con moderación, un exceso podría ser perjudicial para el organismo. Asimismo, es de vital importancia que un especialista en el tema autorice su ingesta de acuerdo con las condiciones de salud de cada persona.
Por último, cabe mencionar que la bebida preparada con esta hierba tan popular sirve para bajar los niveles del colesterol y triglicéridos en la sangre.