El hígado es uno de los órganos más grandes del cuerpo y es el que se encarga de digerir los alimentos, almacenar energía y eliminar las toxinas. Cuando se altera alguno de estos proceso, puede aparecer la enfermedad por hígado graso, una afección en la que se acumula grasa en el hígado.

De acuerdo con el Manual MSD, las causas más comunes de esta patología en Estados Unidos y otros países occidentales son el consumo de grandes cantidades de alcohol, obesidad, anomalías metabólicas, toxinas, ciertos fármacos, trastornos metabólicos hereditarios y el embarazo.

Por lo general, el hígado graso no causa ningún tipo de síntomas: sin embargo, en algunas personas se pueden notar signos como cansancio o molestias abdominales vagas. Además, el hígado tiende a aumentar de volumen, lo que puede ser detectado por el médico durante la exploración.

Para tratar esta enfermedad, es importante acudir al médico para determinar la causa por medio de análisis de sangre, pruebas de diagnóstico de imágenes e incluso de una biopsia hepática. Dependiendo del nivel de gravedad, es especialista de salud, puede aconsejar la adopción de una nueva dieta alimenticia saludable y el cambio de algunos hábitos de vida como dejar de beber alcohol y bajar de peso.

Asimismo, la medicina tradicional sugiere algunos remedios naturales para regular los niveles de grasa del hígado. Por ello, la revista especializada Mejor con Salud da la preparación de varios de ellos:

Infusión de alcachofas

Esta planta es hepatoprotectora y se puede preparar en infusión para ayudar a recuperar la salud del hígado.

Ingredientes:

  • 4 alcachofas
  • Agua (cantidad necesaria)

Preparación:

  • En primer lugar, se debe lavar bien las alcachofas para que eliminar todo rastro de tierra entre sus hojas.
  • Después, colocar las alcachofas en una olla y cubrirlas con agua.
  • Por último, llevar la olla al fuego, hasta que las alcachofas estén cocidas. El agua se reducirá hasta la mitad, aproximadamente.
  • Finalmente, se debe tomar la infusión a lo largo del día.

Infusión de boldo y diente de león

Estas dos hierbas medicinales son ideales para aliviar la sintomatología del hígado graso. Específicamente, las hojas del diente de león se pueden incluir también en ensaladas.

Ingredientes:

  • 8 hojas de boldo
  • 1 cucharadita de raíz de diente de león.
  • 1 taza de agua.

Preparación:

  • Inicialmente, se debe calentar el agua y, cuando llegue a ebullición, apartar del fuego, y agregar las hierbas.
  • Después, dejar la infusión tapada por cinco minutos.
  • Pasado este tiempo, colar y beber una taza después de cada comida.

Semillas de papaya y limón

Incluir el consumo diario de una taza de papaya debe convertirse en un hábito para quienes padecen e hígado graso. Además, su consumo se puede combinar con el limón, un fruto cítrico.

Ingredientes:

  • 5 o 6 semillas de papaya
  • 1 cucharada de jugo de limón.
  • 1 vaso de agua.

Preparación:

  • Se debe abrir la papaya, extraer las semillas y ponerlas a secar al sol.
  • Una vez estén secas, triturar de cinco a seis semillas.
  • Agregar este polvo al agua e incorporar el jugo de limón recién exprimido.