Los hongos en la piel, que se conoce como micosis en la piel, es un tipo de enfermedad que se causa debido a los hongos que proliferan en el aire o en algunas sustancias. Por lo general, esta afección causa distintos síntomas como picazón, enrojecimiento y descamación, que se puede extender en cualquier parte del cuerpo.
El surgimiento de estas afecciones en la piel son más frecuentes en ambientes cálidos, porque el calor y el sudor favorecen la multiplicación de los hongos que habitan en la dermis, causando una infección mayor. Para entender este problema en la piel, es importante detallar y reconocer los tipos de micosis en la piel, los cuales se pueden clasificar dependiendo el área afectada y el tipo de hongo.
De acuerdo con la Clínica Mayo, la infección que más se relaciona con los hongos en la piel es la tiña, “una erupción cutánea causada por una infección micótica” que en muchos casos se vincula con el pie de atleta y se extiende tras el contacto de una persona a otra o animal infectado.
El principal síntoma que se distingue es la comezón en la piel, que provoca la aparición de escamas en los glúteos, brazos o piernas.
Por ello, para combatir los diferentes tipos de hongos, especialmente los que se generan por el conocido pie de atleta, se puede combatir con algunos remedios caseros o plantas medicinales, un ejemplo es el árbol de té.
Según un artículo publicado por el portal de salud Cuerpo Mente, esta planta tiene propiedades antimicrobianas y antivirales. Además de ser antifúngica, un efecto que no permite la propagación de hongos.
Por ejemplo, el sitio web asegura que esta planta puede ser óptima para el pie de atleta y la onicomicosis, esto se debe a que algunas personas tienden a tener una apatía a ciertos tratamientos con antimicóticos. Es entonces que su uso es tópico, más no digerible.
Modo de uso
- En una taza de agua agregar aceite de té de árbol.
- Humedecer un algodón o un paño.
- Aplicar en la zona afectada.
Una de las contraindicaciones que se deben tener presentes con el uso de este aceite es que puede provocar dermatitis de contacto, por lo que es indispensable consultar con un profesional de la salud para regularlo, corroborando cuáles son los agentes que ocasionan la reacción alérgica.
Otros consejos para evitar los hongos:
- Cambio diario de medias: la institución aconseja usar varios pares de medias al día si la persona suda mucho. Sin embargo, en la medida que sea posible, -y por higiene- se recomienda por lo menos un par al día.
- Cambio de zapatos: aunque tener un armario lleno de zapatos es común en los hogares, quizá no utilizar el mismo durante días seguidos puede contrarrestar esta afección que aqueja los pies.
- Higiene: como se mencionó más adelante, el buen lavado y secado de los pies con agua y jabón los protege de cualquier afección.
- No caminar sin calzado: es importante proteger los pies con algún tipo de zapatos y evitar caminar en terrenos encharcados que se observen contaminados.
- No compartir los zapatos: algunos elementos son de uso personal, tales como, las toallas o los cepillos de dientes, por lo que se recomienda incluir en la lista, los zapatos.