Las hormonas son los mensajeros químicos del cuerpo que controlan numerosas funciones y circulan a través de la sangre hacia los órganos y los tejidos. Estos componentes químicos intervienen en diferentes procesos como el metabolismo, el crecimiento y desarrollo y la reproducción. Además, afectan al estado de ánimo y el apetito sexual.
Algunas de las hormonas más importantes son la insulina, las hormonas tiroideas, el cortisol, la hormona del crecimiento y la prolactina, entre otras. En el caso de las mujeres, además de estas hay otras hormonas clave como los estrógenos y la progesterona, las cuales son producidas por los ovarios, entran en actividad en la adolescencia y se enfrentan a variaciones constantes durante el día a día.
Algunos factores que alteran la cantidad de hormonas femeninas son la hora del día, el ciclo menstrual, el estado de salud, la menopausia, el uso de algunos medicamentos, estrés, factores emocionales y embarazo, según indica el portal de bienestar y salud Tua Saúde.
La alteración de las hormonas femeninas puede causar variaciones a nivel del ciclo menstrual, favorecer la aparición de acné, de vellosidades o cambios en el humor, por ejemplo, dependiendo de cuál sea la hormona que se vea alterada.
También se pueden presentar cambios de peso inexplicables, fatiga, trastornos de sueño, problemas digestivos y hasta debilitamiento del cabello. Por este motivo, siempre es importante que ante cualquier cambio se acuda al ginecólogo para que realice una evaluación y, si es necesario, indique tratamiento.
Según información del medio especializado en salud Medical News Today, las mujeres experimentan naturalmente varios períodos de desequilibrio hormonal a lo largo de su vida: en la pubertad, la menstruación, el embarazo, el parto y la lactancia y en la perimenopausia, menopausia y posmenopausia. De igual forma, tienen riesgo de desarrollar tipos de trastornos de desequilibrio hormonal distintos a los de los hombres debido a que poseen órganos y ciclos endocrinos diferentes.
Para equilibrar el comportamiento hormonal en las mujeres existen algunos remedios caseros que pueden ayudar en el proceso.
Hinojo
El hinojo ayuda a regular el flujo menstrual y alivia los espasmos musculares. En la menopausia puede mejorar la retención de líquidos, los gases, los sofocos y los sudores nocturnos. Con otras plantas diuréticas y antibacterianas, se indica para tratar infecciones urinarias. Esta planta tiene propiedades estrogénicas, carminativas, digestivas, antiespasmódicas y antisépticas.
Se puede tomar en infusión, dos tazas al día; en extracto líquido, en polvo, en cápsulas y también se puede usar el aceite esencial. Según el portal Cuerpo Mente, deben evitarse en tratamientos con estrógenos. No debe tomarse por vía oral en el embarazo ni en la lactancia, ni administrarse a menores de 12 años.
Aceite de lino
Este aceite se extrae de la presión en frío de las semillas de lino. Destaca por su elevado aporte de ácidos grasos esenciales omega 3. Para que sea efectivo se debe tomar siempre en crudo. Es un remedio natural que ayuda a regular las hormonas naturalmente, gracias a su contenido en lignanos. Así mismo, una investigación de la Universidad de las Islas Baleares establece que hay una correlación entre el consumo de linaza y la prevención de la aparición del cáncer de mama, según el portal Mejor con Salud.
Aceite de onagra
Es ideal para las mujeres que han sufrido trastornos menstruales y que enfrentan la menopausia. Contiene ácidos grasos esenciales omega 6, los cuales son imprescindibles para una buena salud hormonal. A la hora de elegir el suplemento de aceite de onagra, es recomendable optar por uno que incluya vitamina E, ya que mejora su conservación y absorción.
Levadura de cerveza
La levadura de cerveza destaca por su contenido en zinc, un mineral muy beneficioso para desarrollar una buena producción y secreción hormonal, según lo afirma un estudio realizado por la Universidad Técnica del Medio Este de Turquía.
Salvia
Un síntoma frecuente en la menopausia, y que puede empeorar con la vejez, es la sensación de desgano y fatiga. La salvia ejerce un efecto tónico y antiasténico que puede contribuir a reducir el agotamiento. En la menopausia combate los desarreglos menstruales y sudores nocturnos.
Otras recomendaciones
Además del consumo de estos productos naturales, cuyo consumo siempre es mejor consultar con el médico, se deben tener otras recomendaciones para regular el tema hormonal: reducir los niveles de estrés, practicar ejercicio de forma moderada, descansar lo suficiente y reducir el consumo de cafeína.