El impétigo, a pesar de no ser una enfermedad muy conocida, se trata de una infección cutánea muy contagiosa que afecta principalmente a los bebés y los niños pequeños.
Según Mayo Clinic, esta afección aparece mediante llagas rojas en la cara, especialmente alrededor de la nariz, la boca, las manos y los pies, y en el transcurso de una semana estas se revientan y producen costras desagradables.
Dicha infección es causada por las bacterias Streptococcus pyogenes o Staphylococcus aureus, las cuales afectan considerablemente las capas más profundas de la piel. Con frecuencia, estas bacterias se contraen cuando el sistema inmune es muy débil en las personas adultas mayores y, especialmente, en los niños y personas con enfermedades autoinmunes.
Cabe mencionar que esta infección de la piel tiene distintos tipos, el más común es el impétigo no bulloso, el cual genera heridas dentro de la nariz y alrededor de los labios. La revista especializada en salud Tua Saúde señala que los principales características de este impétigo son que las heridas generan bastante pus y evolucionan de manera rápida, formando costras con una coloración dorada o de color miel.
Otro tipo de impétigo es el bulloso o ampolloso, que genera heridas rojas similares a las picaduras de insectos y tienden a evolucionar rápido hasta formar ampollas con líquido amarillento. A su vez, estas pequeñas llagas generan comezón y enrojecimiento en la piel alrededor de las ampollas y suele presentarse fiebre superior a los 38 °C.
Según Tua Saúde, “el impétigo bulloso es el segundo tipo más común y se desarrolla en los brazos, piernas, pecho y abdomen, siendo raro en el rostro”.
Así mismo, el ectima o impétigo profundo tiende a generar heridas abiertas con pus, el surgimiento de costras grandes y el enrojecimiento de la piel alrededor de las costras.
Esta infección es una de las más graves, ya que afecta las capas más profundas de la piel, especialmente en las piernas y en los pies. Es porque estar razón que su tratamiento suele demorar más tiempo que los otros impétigos y deja pequeñas cicatrices en la piel.
¿Cómo se transmite el impétigo y cuál es su tratamiento?
Esta es una de las enfermedades cutáneas más contagiosa debido a que las bacterias que la generan se transmiten con facilidad mediante el contacto con el pus que se liberan de las llagas. Es por esta razón que lo más aconsejable es que el menor se mantenga aislado en casa durante dos días después de haber iniciado un tratamiento.
De este modo, es fundamental iniciar con un tratamiento lo antes posible para evitar su contagio. Por lo general, este debe ser orientado por un pediatra para el caso de los bebés y niños, o por un dermatólogo en el caso de los adultos.
Los especialistas en salud suelen tratar el impétigo con la formulación de pomadas antibióticas, pero en algunos casos, es necesario suavizar las costras con agua tibia antes de aplicar el medicamento recetado para mejorar los efectos del tratamiento.
Entre las recomendaciones que da a conocer Tua Saúde, es necesario que cuando se dé esta infección cutánea, se debe solicite al médico especialista exámenes de laboratorio para lograr identificar qué tipo de bacteria es la que está provocando la enfermedad.