Las infecciones urinarias son más comunes de lo que se cree. Ocurren cuando entran bacterias a la uretra y puede provocarse en cualquier parte del sistema urinario (riñones, vejiga o uretra). Generalmente, dichas bacterias vienen de la piel o el recto e infectan las vías urinarias.
Según Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, son las mujeres las que tienen un mayor riesgo de contraer una infección de este tipo. Si esta patología no es tratada a tiempo, puede extenderse al resto del sistema urinario y tornarse grave.
Otros factores de riesgo explicados por la institución, son:
- Ciertos tipos de anticonceptivos: “las mujeres que usan diafragmas como método anticonceptivo pueden tener un mayor riesgo, al igual que las mujeres que usan espermicidas”, explica Mayo Clinic.
- Obstrucción en las vías urinarias: las personas que padecen cálculos renales o sufren de próstata agrandada tienden a obstaculizar la salida de la orina, por lo que queda atrapada y se produce el riesgo de sufrir infecciones urinarias.
- Actividad sexual: tener una vida sexualmente activa puede aumentar el riesgo de tener más infecciones urinarias, sobre todo en las mujeres, pues su uretra es más corta que la de los hombres, lo que acorta la distancia entre las bacterias que se hospedan en el ano con la uretra.
- Menopausia: con el pasar de los años disminuye la producción de estrógeno, produciendo, al mismo tiempo, cambios en las vías urinarias que las hacen propensas a infecciones.
En cuanto al tratamiento, el médico analizará la situación de cada persona y recurrirá, casi siempre, al uso de antibióticos que eliminen la bacteria. Al cabo de unos días, deberá desaparecer la infección junto con sus síntomas, si no es así, es posible que el problema sea diferente y requiera de otro tipo de exámenes.
Si el diagnóstico es una infección urinaria simple como la cistitis, es posible preguntar al médico por algunos tratamientos naturales. Por ejemplo, el portal especializado Mejor con Salud, explicó que el limón es ideal para este tipo de padecimientos, pues “es un antiséptico y antibacteriano natural por su contenido de ácidos cítricos”.
Para explotar estas propiedades es posible beber agua tibia con limón en ayunas con una pequeña hoja de menta. También es posible combinarlo con otros ingredientes para potenciar sus efectos y agregar más nutrientes a la bebida.
Para una de estas preparaciones se requiere de un ramo o 15 gramos de perejil fresco con tallo, una rodaja de limón y 250 mililitros de agua hirviendo. Se lava y se pica el perejil y añade al agua y dejar reposar durante 5 a 10 minutos. Finalmente, colar y beber varias veces al día.
Además del limón, el portal Ciencia y tecnología, indicó que también existen otros remedios naturales con los que se pueden aminorar los síntomas de la cistitis:
- Moringa: se aconseja tomar cuatro veces al día entre jugo para ver los resultados de esta planta medicinal. La moringa es altamente recomendada en casos de desnutrición, pues, posee varias vitaminas y minerales.
- Perejil: es una planta que posee apigenina, un compuesto que tiene propiedades diuréticas y antiinflamatorias, ayudando a eliminar las bacterias que se encuentran en la vejiga a través de la orina y a aliviar los síntomas.
- Rábanos: este alimento tiene propiedades diuréticas que ayudan a expulsar las bacterias a través de la orina. Los rábanos suelen ser recomendados para quienes padecen regularmente de la afección. Para usarlo de esta forma, hay que preparar media taza de la hortaliza y beber dos veces al día.
- Espinacas: los antioxidantes, vitaminas y hierro que contiene esta verdura la convierten en una aliada para la salud del cuerpo humano. Es recomendable consumirla cruda en ensaladas o batidos para sacar el mayor provecho de sus beneficios.