La glucosa es un tipo de azúcar y es la principal fuente de energía del cuerpo humano. Para que pueda ingresar a las células es necesaria la insulina, una hormona producida por el páncreas. Según explica Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, cuando hay una cantidad elevada o insuficiente de glucosa en el torrente sanguíneo, se pueden desarrollar enfermedades como la diabetes.
La hiperglicemia no provoca síntomas hasta que la concentración de glucosa es muy elevada, generalmente, cuando está por encima de los 180 a 200 miligramos por decilitro (mg/dl) o de los 10 a 11,1 milimoles por litro (mmol/l).
En contexto, las afecciones de diabetes crónica comprenden diabetes tipo 1 y diabetes tipo 2. Estas son potencialmente reversibles e incluyen prediabetes y diabetes gestacional.
Una dieta balanceada puede ayudar a reducir los niveles de glucosa y, para ello, se deben incluir frutas y vegetales; granos integrales como trigo integral, arroz integral, cebada, quinua y avena; proteínas como carnes magras, pollo, pavo, pescado, huevos, nueces, fríjoles, lentejas, así como productos lácteos descremados o bajos en grasa como leche, yogur y queso.
También se recomiendan algunas infusiones a partir de ingredientes naturales que pueden ayudar a controlar el azúcar en la sangre, especialmente para aquellas personas que no les gusta beber únicamente agua.
Una de ellas en la infusión de eucalipto. Las hojas de eucalipto ayudarían a nivelar los índices de glucosa debido a que tienen propiedades hipoglucemiantes y antiinflamatorias. Según el portal Cuerpo Mente, esta planta puede ser una buena opción natural para el tratamiento de la diabetes no insulinodependiente.
“Esta planta posee propiedades que ayudan a disminuir los niveles de azúcar en la sangre, porque es hipoglucemiante, lo cual quiere decir que disminuye los niveles de glicemia en el torrente sanguíneo”, agrega el portal Gastrolaweb.
Beneficios del eucalipto para el sistema respiratorio
Por otra parte, una sustancia llamada eucaliptol, que contiene el eucalipto, posee un efecto mucolítico que ayuda a eliminar las mucosidades y limpiar las vías respiratorias para permitir el tránsito de aire limpio. El eucaliptol también reduce la irritación, que muchas veces se presenta en la garganta, asegura el sitio web Hogarmanía.
Además de mejorar las afecciones respiratorias, puede ayudar a aliviar el dolor de garganta. Solamente se debe hervir hojas de eucalipto en agua y hacer gárgaras con el agua tibia reduce el dolor y desinfectar la zona afectada, según información del portal Mejor con Salud.
Otro de los beneficios que ofrece el eucalipto para el sistema respiratorio es que es ideal para tratar enfermedades crónicas como el asma, que resulta difícil de manejar en muchos casos y presenta una molestia permanente para el que la padece.
De acuerdo con el portal web Arahi, algunos expertos recomiendan el eucalipto para las anginas fuertes. Esta planta se puede utilizar para realizar gargarismos con líquidos que contengan su aceite o extracto.
¿Cómo utilizar el eucalipto?
Son varias las formas en las que se puede utilizar y consumir el eucalipto; para conocer algunas de ellas, el portal web Arahia explica cuatro formas para aprovechar sus beneficios:
- Infusión
Solamente se debe hervir a fuego lento cuatro hojas de eucalipto junto con una taza de agua durante diez minutos. Luego, se debe tomar esta infusión tres veces al día para aliviar los estados iniciales de resfriados, catarros nasales, gripa, asma, sinusitis y dolor de garganta.
- Inhalaciones
Se debe usar media taza de aceite esencial de eucalipto o se puede colocar seis hojas de eucalipto en un recipiente y luego ponerlo a calentar para hacer inhalaciones que alivien los resfriados y las infecciones de las vías respiratorias.
- Compresas
Para esto se debe mojar un disco de algodón con diez gotas de aceite esencial y un poco de agua. Luego, aplicarlo sobre las articulaciones hinchadas o adoloridas.
- Aceite
Se debe agregar media taza de aceite de eucalipto y un poco de aceite de almendras para friccionar el pecho. Esto ayudará a tratar los resfriados, la bronquitis, el asma y los problemas respiratorios. Asimismo, este aceite utiliza el esencial en forma externa para tratar condiciones de la piel como el herpes o disminuir el dolor causado por enfermedades inflamatorias en articulaciones y músculos.