Los especialistas han advertido sobre la importancia de mantener una buena circulación sanguínea en el cuerpo para evitar la presencia de enfermedades, que pueden llevar inclusive a la muerte.

Lo primero que hay que entender es que la sangre recorre el cuerpo a través de los vasos sanguíneos, (arterias y venas); ese proceso es lo que se conoce como la circulación, de cuya acción hace parte fundamental el corazón.

También se debe tener en cuenta que la sangre es la encargada de suministrar oxígeno y nutrientes a todo el cuerpo, y elimina el dióxido de carbono y los elementos residuales.

Son varias las enfermedades que están relacionadas con una mala circulación, por ejemplo la coronaria, que sucede cuando las arterias que nutren el corazón se ven afectadas, sea por estrechamiento o por obstrucción. De no tratarse a tiempo, puede llevar a que una persona sufra de un infarto.

Así mismo se encuentra la carotídea, que aunque es parecida a la anterior, compromete las arterias carótidas que se encuentran viajando desde el corazón hasta el cuello, de acuerdo con el portal del Centro de Estudios Vasculares.

Otra enfermedad es el aneurisma, que es el ensanchamiento o abultamiento que nace desde la pared de una arteria. Se trata de una situación peligrosa debido a los cambios de presión sanguínea, que pueden causar la muerte.

Por su parte, la arterioesclerosis, que es la acumulación de placas en las paredes de las arterias, produce la hipertensión arterial y puede estar relacionada con la presencia de grasa, calcio o colesterol.

La mala circulación sanguínea puede provocar cambios irreversibles en el organismo. | Foto: Getty Images

Otras enfermedades de circulación

Los expertos también han advertido sobre otras enfermedades de circulación como las várices que se producen cuando las venas se dilatan o se tuercen. Estas aparecen sobre todo en las piernas, aunque también afectan cualquier parte del cuerpo y suelen ser producto de la enfermedad venosa crónica.

La vasculitis, que significa una inflamación de los vasos sanguíneos y la enfermedad de Raynaud, que se presenta cuando los vasos sanguíneos se estrechan por cambios de temperatura, principalmente ante bajas temperaturas, o por estrés y emociones fuertes. Se le conoce también como fenómeno de Raynaud.

Entre los síntomas de una mala circulación se encuentran hinchazón, sensación de piernas cansadas, calambres en las piernas, sensación de hormigueo, venas dilatadas visibles a través de la piel, cambios de color y textura en la piel, úlceras y comezón en las piernas.

Entre las recomendaciones para evitar complicaciones en el sistema circulatorio se encuentran una dieta equilibrada, realizar ejercicio y los masajes, así como algunas infusiones y jugos elaborados con ingredientes que cuenten con propiedades que ayudan a ese propósito. La recomendación es tomar dos infusiones al día después del almuerzo y la cena.

Para aprovechar todos sus beneficios, la persona puede tomar dos infusiones al día, después de la comida y de la cena.

Grosellero negro: una fruta negra que ayuda a combatir la inflamación y es un buen diurético, que favorece la microcirculación de la sangre. Se utilizan sus hojas, yemas y frutos. | Foto: Getty Images

Infusiones

Se trata de tés preparados con frutas o las verduras que son ricos en fibra, con lo cual se ayuda a controlar el estreñimiento, que es una de las causas de afecciones a la circulación. De acuerdo con el portal Saber vivir Tve, también contienen sustancias venoprotectoras.

Se aconseja que una vez estén listos para consumir, no se deben colar debido a que perderían gran parte de la fibra. Entre las infusiones recomendadas se encuentran las preparadas con:

- Grosellero negro: fruta negra que ayuda a combatir la inflamación y es un buen diurético, que favorece la microcirculación de la sangre. Se utilizan sus hojas, yemas y frutos. Se cocina en agua (una cucharada sopera por vaso, de una a tres veces al día). También se puede encontrar en extracto seco o líquido.

- Centella asiática: planta de la que se usan sus extractos con saponinas, que ayudan a reducir síntomas como la inflamación, el edema, el picor y los calambres. Se recomienda una dosis de entre 250 y 1.000 mg al día.

- Rusco: empleado durante mucho tiempo como diurético. Estudios científicos determinaron sus propiedades venotónicas, favoreciendo la contracción de las venas y facilitando la circulación de la sangre. Produce una mejoría del edema y la inflamación. Es un alivio para las piernas cansadas y también para las hemorroides. Para prepararlo en infusión, es suficiente una cucharadita de la planta seca por taza.

Cerezas y jengibre: por su acción analgésica, contribuyen a aliviar el dolor de piernas. En el caso de las cerezas, son ricas en potasio, favorecen a las personas que suelen padecer calambres o molestias musculares. | Foto: Getty Images

- Naranjo amargo: sus flores blancas y muy olorosas son conocidas como flores de azahar. Es un buen remedio contra la ansiedad, el estrés, combate la fragilidad de los capilares, las varices y la hinchazón de los tobillos.

- Cerezas y jengibre: por su acción analgésica, contribuyen a aliviar el dolor de piernas. En el caso de las cerezas, son ricas en potasio y favorecen a las personas que suelen padecer calambres o molestias musculares.

- Uva (vid) roja: contiene polifenoles como flanovoides, taninos y antocianos, que tienen un gran poder antioxidante y vasoprotector. Tomar esta infusión combate la insuficiencia venosa y refuerza los capilares, rediciendo las arañas vasculares.

- Rábano y zanahoria: debido a la presencia de enzimas, mejoran la circulación, sobre todo el rábano. Entre tanto, la zanahoria aporta una buena cantidad de fibra, que favorece la eliminación de líquidos.

- Ginkgo biloba: es beneficiosa para las personas con problemas de circulación o para prevenir el desarrollo de enfermedades cardiovasculares. Igualmente, sus flavonoides fortalecen las venas y ayudan a evitar la formación de coágulos.

- Remolacha con perejil: por sus nitratos naturales, la remolacha contribuye a abrir los vasos sanguíneos, mientras que el perejil, rico en luteolina y vitamina C, es un potente antiinflamatorio. Combinados, se convierten en un excelente depurador sanguíneo, muy rico en antioxidantes.

- Castaño de Indias: medicamento tradicional a base de plantas, alivia los síntomas que provoca la insuficiencia venosa, mejora la función de las válvulas y reduce la inflamación en caso de varices. Por la presencia de escina, ayuda a combatir las arañas vasculares y las hemorroides.