La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (MedlinePlus) menciona que el sistema vascular esta compuesto del corazón, la sangre y los vasos sanguíneos (arterias y venas), mismos que transportan y suministran sangre a todos los tejidos corporales.

Por ejemplo, las arterias la transportan del corazón a los tejidos, mientras que las venas la llevan de regreso al órgano cardíaco.

Pero al igual que todas las parte del cuerpo, los vasos sanguíneos pueden también sufrir algunas complicaciones si no existen hábitos saludables como la actividad física y una alimentación balanceada.

Por tal razón, las venas se pueden agrandar e hinchar conocida esta afección como várices o incluso sufrir una inflamación denominada vasculitis.

Várices

De acuerdo con la Clínica Mayo, las venas varicosas se retuercen por la acumulación de sangre debido a que las válvulas que se encuentran a ellas se averían y permiten que el flujo sanguíneo retroceda.

Es entonces que el factor de riesgo principal para desarrollar venas varicosas es la edad, porque, según explica, con el paso de los años naturalmente se desgastan las válvulas y el flujo sanguíneo no lo pueden regular.

Las varices se producen debido a la insuficiencia venosa es decir, por la incapacidad de las venas de las piernas para ejercer su función de retorno de la sangre hacia el corazón. | Foto: Getty Images

Asimismo, asegura que las mujeres suelen ser más propensas a su aparición porque presentan cambios hormonales frecuentes como la menstruación o durante el embarazo. Sin embargo, la obesidad causa presión en las venas, y estar sentado por mucho tiempo desmejora la circulación.

De ahí que el centro médico aconseja, dentro de las medidas preventivas, evitar el uso de zapatos altos e incluso medias apretadas; asimismo, procurar mantener en movimiento el cuerpo para evitar que se formen coágulos, Y por supuesto, hacer ejercicio regularmente como medida para bajar y controlar el peso.

Las venas várices deben ser tratadas por un especialista. | Foto: Copyright

En este sentido, la creencia popular señala algunos remedios caseros como útiles para combatir las venas várices, como el uso de vinagre o en dado caso, la elaboración de un jabón con áloe vera y zanahoria.

Jabón de aloe vera y zanahoria

Para Tua Saúde, la sábila es una planta medicinal con muchas propiedades, entre las cuales se destacan sus efectos antioxidantes y antiinflamatorios.

Por ejemplo, incita al cuerpo a acelerar su proceso de cicatrización; además de favorecer la piel tras combatir problemas como las quemaduras. Pero se debe tener en cuenta tras su uso sus contraindicaciones y efectos secundarios.

El aloe vera tiene antioxidantes. | Foto: Getty Images

En el caso de la zanahoria, al estar compuesta de vitamina K, el sitio explica que previene posibles hemorragias, mejorando la cicatrización. Es así como Gastrolab Web da a conocer el paso a paso para elaborar este jabón contra las várices:

  1. En una licuadora añadir la pulpa de 1 penca de sábila junto con 2 zanahorias picadas. Si se desea o se observa una mezcla espesa, se debe agregar poquito de agua.
  1. Luego colar la mezcla para obtener el zumo.
  1. Posteriormente, en baño María colocar la glicerina. Una vez derretida añadir la mezcla de zanahoria y aloe vera.
  1. Dejar reposar unos minutos.
  1. Rociar los moldes de jabón con alcohol y verter la mezcla.
  1. Cuando se endurezca desmoldar y usar el jabón para combatir las venas várices.