Un juanete es una protuberancia ósea que se forma en la articulación en la base del dedo gordo del pie y ocurre cuando algunos de los huesos de la parte frontal del pie se salen de su lugar, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Además, en su portal web reveló que los signos y síntomas de un juanete incluyen los siguientes, según la entidad:
- Un abultamiento en la parte exterior de la base del dedo gordo del pie.
- Hinchazón, enrojecimiento o dolor alrededor de la articulación de este dedo.
- Callos o callosidades: a menudo se forman donde el primer y segundo dedo del pie se rozan entre sí.
- Dolor continuo o dolor que aparece y desaparece.
- Movimiento limitado del dedo gordo del pie.
Asimismo, señaló que estos factores podrían aumentar el riesgo de tener juanetes:
- Tacones altos: el uso de tacones altos empuja a los dedos de los pies a la parte delantera de los zapatos, a menudo apoyándolos.
- Zapatos que no quedan bien: las personas que usan zapatos demasiado apretados, demasiado estrechos o demasiado puntiagudos son más propensas a desarrollar juanetes.
- Herencia: la tendencia a desarrollar juanetes puede ser el resultado de un problema hereditario de la estructura o anatomía del pie.
Asimismo, las opciones de tratamiento varían de acuerdo con la gravedad del juanete y de cuánto dolor causa y algunas sugerencias de la entidad sin ánimo de lucro son:
- Nuevos zapatos. Usar zapatos espaciosos y cómodos que brinden suficiente espacio para los dedos de los pies.
- Amortiguación. El relleno o las almohadillas de venta libre para juanetes no medicados podrían resultar útiles. Actúan como un amortiguador entre el pie y el zapato, y alivian el dolor.
- Medicamentos. Acetaminofén, ibuprofeno o naproxeno pueden ayudar a controlar el dolor de un juanete. Las inyecciones de cortisona también podrían ayudar.
- Plantillas de zapatos. Las plantillas acolchadas pueden ayudar a distribuir la presión de manera uniforme cuando se mueven los pies, lo que reduce los síntomas y evita que el juanete empeore. Los soportes de venta libre pueden brindar alivio a algunas personas; otras requieren dispositivos ortopédicos con receta médica.
- Aplicación de hielo. Aplicar hielo en el juanete después de haber estado de pie demasiado tiempo o si se inflama puede ayudar a aliviar el dolor y la inflamación, pero si se tienen problemas de sensibilidad o de circulación en los pies, se debe consultar con un médico antes de aplicar hielo.
Sobre la misma línea, el diario español Mundo Deportivo reveló, en su sección de salud, que existen remedios caseros para aliviar el dolor como, por ejemplo, masajear el juanete con aceite de lavanda o realizar un baño de pies con sal o con ruda. Asimismo, recomendó aplicar calor en la zona adolorida.
De todos modos, antes de utilizar un remedio casero lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.
Por su parte, es importante señalar que las posibles complicaciones de los juanetes incluyen:
- Bursitis. Esta afección dolorosa ocurre cuando las pequeñas almohadillas llenas de líquido que amortiguan los huesos cerca de las articulaciones se inflaman.
- Dedo en martillo. Una curvatura anormal que ocurre en la mitad de la articulación de un dedo del pie, por lo general el dedo junto al dedo gordo, puede causar dolor y presión.
- Metatarsalgia. Esta afección causa dolor e hinchazón en la bola del pie.