“El colesterol es un tipo de grasa (lípido) que está presente en la sangre”, explica Kaiser Permanente, uno de los principales proveedores de atención médica y planes de salud sin fines de lucro de Estados Unidos. Añade que las células del organismo necesitan colesterol y el cuerpo está en la capacidad de producir todo el colesterol que necesita, aunque también lo puede obtener a través de algunos alimentos.
“Si tiene demasiado colesterol, este empieza a acumularse en las arterias. Esto se llama endurecimiento de las arterias o aterosclerosis. Es el punto de comienzo de algunos problemas del corazón y del flujo sanguíneo”, reseña la entidad norteamericana.
Esta acumulación de colesterol, que se denomina colesterol alto o LDL (lipoproteínas de baja densidad), puede provocar un estrechamiento de las arterias y dificultar el paso de la sangre a través de estos conductos, además de abrir la posibilidad a la formación de coágulos sanguíneos e inflamación “peligrosos que pueden causar ataques al corazón y ataques cerebrales”.
Hay distintos alimentos que podrían ayudar a bajar los niveles de colesterol elevado en la sangre, entre los que se destacan la zanahoria y la espinaca, debido al alto contenido que ostentan cada uno. Por un lado, la zanahoria, según una guía publicada por la Fundación Española de la Nutrición (FEN), es rica en vitamina A y betacaroteno, siendo este último un antioxidante natural. Explica que una zanahoria de tamaño medio “cubre el 89 % de las necesidades diarias de esta vitamina para hombres de 20 a 39 años y el 112 % para mujeres de la misma edad”.
Del mismo modo, la presencia de esta vitamina en la zanahoria le permite ser una hortaliza que contribuye al mantenimiento de la visión, la piel y las mucosas en condiciones normales. En lo que refiere a su contenido de betacaroteno, el pigmento que ayuda al organismo en la producción de vitamina A sería el factor que conviene para reducir el colesterol en el torrente sanguíneo, reveló un estudio hecho por la Universidad de Illinois en Estados Unidos.
Para entenderlo mejor es preciso decir que el beneficio de la hortaliza se produce cuando el betacaroteno se transforma en vitamina A, es ahí cuando ayuda a reducir el colesterol LDL presente en el organismo. Además, es una es fuente de fibra soluble, pues contiene 2,8 gramos por cada 100 gramos de este alimento.
Entre tanto, la espinaca es recomendada por los expertos para ser incluido en la dieta de una persona que tenga colesterol alto debido a su alto contenido de fibra, reseña el Instituto de Nutrición y Salud Kellogg’s (INSK). La entidad explica que 90 gramos de este vegetal de hoja verde cocido, es decir media taza, aporta 3,2 gramos de fibra. “Por lo tanto colabora en la prevención o mejoría del estreñimiento, interviene en la reducción del colesterol y en la velocidad de paso de los azúcares a la sangre, ayudando a prevenir enfermedades cardiovasculares y diabetes”, dice.
Mejor con Salud, una revista sobre buenos hábitos y cuidados para la salud, reseña una bebida natural que podría ayudar a reducir el colesterol alto del torrente sanguíneo, para la cual se necesitan solo tres zanahorias y dos hojas de espinaca frescas.
El primer paso es retirar las puntas de la zanahoria, para luego picar en trozos pequeños el resto de esta hortaliza y luego se hace lo propio con las hojas de espinaca. Surtido el proceso, se vierten los ingredientes en la licuadora y se licúan hasta que se hayan integrado. De quedar con una textura muy espesa, se puede agregar un poco de agua.
El portal recomienda consumir este jugo después de cada comida, pues será el momento indicado para que la fibra que contienen las verduras en mención ayuden a limpiar las arterias del colesterol “con mayor eficacia”, anota.