La anemia es un trastorno de la sangre que se presenta cuando el cuerpo no cuenta con la cantidad suficiente de glóbulos rojos sanos. Los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos indican que es posible que la persona tenga muy pocos o que estos carezcan de una proteína rica en hierro llamada hemoglobina.

Estos glóbulos son los responsables de transportar el oxígeno por todo el cuerpo y la hemoglobina es la que lo lleva. Cuando el número de glóbulos rojos o el nivel de hemoglobina es demasiado bajo, el cuerpo no obtiene todo el oxígeno que necesita, lo que hace que la persona se sienta cansada, con falta de aire, mareos, dolores de cabeza, piel pálida o frío en las manos y los pies.

La Clínica Universidad de Navarra, de España, indica que la anemia puede instaurarse de forma aguda o crónica y los síntomas son diferentes en función, precisamente, de la rapidez con que aparezca. “La anemia ligera comienza a manifestarse como una disminución de la resistencia al ejercicio físico, que se acompaña de taquicardia y dificultad respiratoria. Si la anemia se hace más intensa, estos síntomas se acentúan y aparecen con mínimos esfuerzos o incluso en reposo, asociándose a cansancio extremo”, precisa la citada fuente.

Sin embargo, en anemias que se desarrollan en un largo período es posible que el organismo se adapte y no se presenten señales de la afección.

Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), indican que el 15 % de la población sufre anemia ferropénica, provocada por la carencia de hierro, uno de los minerales esenciales que necesita el organismo. Las embarazadas, los ancianos y los niños son las poblaciones más afectadas.

El consumo de hierro es una de las principales recomendaciones para prevenir y hacerle frente a este padecimiento y la mejor forma de obtenerlo es con la alimentación, en la cual se puede incluir una bebida rica en este mineral.

Se trata del jugo de remolacha, al que se le puede añadir acelga, espinaca y perejil. Para aportar vitamina C que promueva la absorción de hierro, se usa un limón entero sin piel, de acuerdo con información del portal Hoy Cocino Sano, escrita por la coach nutricional Kenia Urdaneta. La remolacha tiene un contenido de hierro, ácido fólico y vitaminas.

Para preparalo se requiere de media taza de hojas de espinacas, igual cantidad de acelgas y hojas de acelgas, un puñado de perejil, una remolacha, un centímetro de jengibre y un limón sin piel. Se lavan todos los ingredientes, se quita la piel a los vegetales que la contienen, se cortan en pequeños trozos y se remoja la espinaca, la acelga y el perejil en agua con vinagre por al menos cinco minutos, luego se enjuaga con abundante agua. Se mezclan todos los ingredientes en la licuadora y se consume de inmediato.

Si bien es un producto natural que ayuda a subir los niveles de hierro en la sangre, no es un tratamiento, por lo que lo recomendado es consultar al médico.

¿Cómo prevenir esta enfermedad?

Los especialistas del portal Cinfasalud, de España, hacen una serie de recomendaciones que ayudan a prevenir el desarrollo de esta afección.

Comer variado: Una dieta con todos los grupos de alimentos asegura que el cuerpo obtenga la cantidad suficiente de hierro. Alimentos fuentes de este mineral son la ternera, almejas y mejillones; nueces, pistachos, almendra tostada; hígado; sésamo, berros, acelgas, espinacas; lentejas, garbanzos, guisantes, germinado de lenteja; trigo, pan, arroz y pan de avena.

Alimentos cítricos: Los zumos de naranja o mandarina, brócoli, kiwi y melón son apropiados y mejoran la absorción de hierro.

Vitamina B12. La deficiencia de esta vitamina puede causar anemia perniciosa. Este nutriente se puede hallar en la carne vacuna, aves, pescado, huevos, lácteos y cualquier alimento enriquecido con la misma.

Tomar precauciones si la persona está en embarazo: Las necesidades nutricionales de hierro se duplican en el embarazo, por lo que las mujeres en este estado deben seguir una dieta rica en hierro, vitamina C y ácido fólico.

Evitar el autodiagnóstico: Siempre es recomendable acudir al médico en lugar de comenzar a tomar suplementos alimenticios o vitaminas por cuenta propia, porque se corre el riego de una intoxicación por hierro y además, de existir anemia, es posible que tenga su origen en algún problema grave que requiera un tratamiento diferente.