La diabetes es una enfermedad metabólica que se caracteriza por elevados niveles de azúcar (glucosa) en la sangre. A esta glucosa se le denomina glucemia.

Cuando esto sucede es porque normalmente el cuerpo no segrega suficiente insulina o esta no funciona bien. La insulina es una hormona que fabrica el páncreas y que permite que las células utilicen la glucosa de la sangre como fuente de energía.

“Un fallo de la producción de insulina, de la acción de la misma, o de ambas cosas, genera un aumento de los niveles de glucosa en la sangre (hiperglucemia). De no controlarse adecuadamente, a largo plazo, la presencia continua de glucosa alta en la sangre puede provocar alteraciones en la función de diversos órganos, especialmente los ojos, los riñones, los nervios, el corazón y los vasos sanguíneos”, precisa la Fundación para la Diabetes Novo Nordisk, de España.

La ingesta de una alimentación balanceada y la práctica de ejercicio son dos aspectos clave para mantener bajo control los niveles de glucosa en la sangre, pero de manera complementaria se puede recurrir al consumo de algunas bebidas que también aportan en este propósito. Estas son algunas de ellas.

Jugo de pepino, limón, jengibre y hierbabuena: El pepino no contiene carbohidratos y aporta vitaminas C y K al organismo, mientras que el limón tiene un bajo índice glucémico en su composición y el jengibre posee diversos micronutrientes favorables en la pérdida de peso, por que resulta favorable para las personas que tienen problemas con sus niveles de azúcar.

De acuerdo con un artículo publicado en el portal Hoy Cocino Sano, escrito por la coach nutricional Kenia Urdaneta, para elaborarlo se requiere de dos pepinos grandes, el zumo de un limón, dos centímetros de jengibre fresco sin piel, cinco hojas de hierbabuena y un vaso de 300 mililitros de agua.

Se remojan todos los ingredientes en un recipiente con agua y vinagre por cinco minutos, luego se enjuaga con abundante agua, se cortan y colocan en una licuadora y se procesan hasta obtener un batido o licuado homogéneo, se cuela y estará listo para ser consumido.

Espinacas y apio: La espinaca es uno de los alimentos que la Asociación Americana de Diabetes recomienda para las personas que padecen esta enfermedad, en tanto que el apio contiene pequeñas cantidades de glucoquina, una sustancia con una acción similar a la insulina, que disminuye el nivel de azúcar en la sangre.

Para elaborar esta bebida, según información del portal Mejor con Salud, se requiere de una zanahoria, dos tallos de apio, una manzana verde, tres puñados de espinacas y de manera opcional un pepino.

Se lavan y escurren bien todos los ingredientes, se corta la manzana, se extrae el corazón y se desechan las semillas. Adicionalmente, se pela la zanahoria y se corta, al igual que el apio. Luego se mezcaln todos los ingredientes en la licuadora con un poco de agua y se sirve y se bebe de manera inmediata.

Acelga, pepino, jengibre y pimentón: Al igual que otras verduras, la acelga contiene fibra, pocas calorías y muy pocos carbohidratos, nutriente que deben vigilar las personas que tiene diabetes, mientras que el pimentón posee propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.

Para preparar este jugo se requiere de tres hojas de acelga, un pepino grande, un pimentón verde, el zumo de un limón, dos centímetros de jengibre fresco y un vaso de agua. Según el portal Hoy Cocino Sano, se remojan las hojas de acelga en un recipiente con agua y vinagre por cinco minutos, luego se enjuaga con abundante agua y se retiran los tallos.

Se lava el pepino, el jengibre y el pimentón y se retiran sus semillas, se cortan y se colocan todos los ingredientes en una licuadora. Se procesa hasta obtener un batido o licuado homogéneo, se cuela y se consume.

Si bien estos son alimentos naturales que pueden ser complementarios en un tratamiento contra la diabetes, no tiene efectos milagrosos, por lo que la recomendación es siempre consultar con el especialista con el fin de obtener el plan de manejo indicado para la enfermedad.