El insomnio es un trastorno del sueño frecuente que puede causar dificultad para conciliar el sueño (quedarse dormido), mantenerlo, o puede hacer que la persona se despierte demasiado temprano y no pueda volver a dormirse, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
De hecho, es importante señalar que el cuerpo necesita dormir entre siete y ocho horas por noche para combatir enfermedades infecciosas y la falta de sueño a largo plazo aumenta el riesgo de obesidad, diabetes y enfermedades del corazón y los vasos sanguíneos (cardiovasculares).
Asimismo, las doctoras Stacy M. Peterson y Brooke L. Werneburg le explicaron a Mayo Clinic que la falta de sueño influye en lo que se come y cuánto se come, dado que las hormonas se regulan durante el sueño y al faltar horas de sueño, las hormonas del hambre se descontrolan y eso aumenta la sensación de hambre y disminuye la saciedad.
Por tal razón, para evitar problemas por la falta de sueño, el Periódico de Aragón reveló que el té de tila es ideal para combatir la falta de sueño en las noches, pues tiene propiedades relajantes.
Así las cosas, para obtener los beneficios hay que añadir 1,5 g de flores y hojas secas de tila en 150 ml de agua hirviendo, tapar y dejar reposar de cinco a diez minutos para finalmente, colar, dejar entibiar y beber.
De todos modos, antes de consumir algún alimento, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.
Por su parte, la entidad sin ánimo de lucro reveló otras recomendaciones para dormir mejor:
- Respetar los horarios de sueño: ser consistente del horario de acostarse y de levantarse todos los días, incluso los fines de semana.
- Mantenerse activo: la actividad habitual ayuda a promover las buenas noches de sueño. Establecer un horario para practicar ejercicios por lo menos algunas horas antes de acostarte y evitar las actividades estimulantes antes de la hora de dormir.
- Evitar o limitar las siestas: las siestas pueden hacer que sea más difícil conciliar el sueño por la noche. Si resulta imposible evitarlas, intentar que no duren más de 30 minutos y no tomar una siesta después de las 3:00 p. m.
- Evitar o limitar la cafeína y el alcohol, y no consumir nicotina: todas estas sustancias pueden hacer que sea más difícil conciliar el sueño, y sus efectos pueden durar varias horas.
- Evitar las comidas abundantes y las bebidas antes de acostarse: un tentempié liviano es suficiente y puede ayudar a evitar la acidez estomacal. Beber menos líquido antes de acostarse para no orinar con tanta frecuencia.
- Controlar los medicamentos que se toma: si la persona toma medicamentos con regularidad, consultar con el médico para saber si estos contribuyen al insomnio. Además, revisar las etiquetas de los productos de venta libre para saber si contienen cafeína u otros estimulantes, como pseudoefedrina.
- No tolerar el dolor: si una afección dolorosa perturba, se debe hablar con el médico sobre las opciones de analgésicos que tengan la eficacia suficiente para mantener el dolor bajo control mientras se duerme.
No obstante, si tras 10 o 30 minutos de tratar de conciliar el sueño no se consigue, lo que recomienda la psicóloga María García, de Blua de Sanitas, al medio de salud Cuídate Plus, es: “levantarse, caminar un rato y cambiar de ubicación hasta que nos relajemos de nuevo”.