El hígado hace parte de los órganos más importantes, ya que es el encargado de facilitar la depuración de toxinas y los desechos del organismo, así como también cumple otras funciones como segregar un producto llamado bilis, que ayuda a descomponer las grasas y las prepara para su posterior digestión y absorción.

Sin embargo, cuando no se tienen los cuidados adecuados, junto con malos hábitos alimenticios y de vida, pueden surgir afecciones como el hígado graso, que también se conoce como la esteatosis hepática o el hígado adiposo, la cual se presenta cuando la grasa se acumula en este órgano, causando inflamación y daños en el cuerpo humano.

Según MedlinePlus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, esta enfermedad tiene qué ver con la grasa que ingresa al organismo y se acumula en el hígado. Como tal, existen dos tipos de hígado graso, uno se denomina enfermedad del hígado graso por alcohol, también llamada esteatosis hepática alcohólica; y el otro enfermedad del hígado graso no alcohólico.

Muchos especialistas consideran esta afección como silenciosa, y que muchas personas no llegan a experimentar ningún tipo de síntoma, incluso si ya está avanzada. No obstante, la enfermedad del hígado graso no alcohólico puede agrandar el órgano afectado, provocando dolor o malestar en la parte superior derecha del abdomen, que es el área entre las caderas y el pecho, precisa el medio especializado en información de salud Medical News Today.

Del funcionamiento del hígado depende muchos otros procesos internos del organismo. | Foto: Getty Images

De hecho, dentro de los principales síntomas que presentan las personas que padecen la enfermedad son fatiga constante y un fuerte dolor en la parte superior derecha del abdomen. Cuando la cicatrización ya está avanzada, las señales de alerta son inflamación abdominal, vasos sanguíneos agrandados, palmas rojas, y color amarillento en la piel y en los ojos.

Por fortuna existe la medicina alternativa que aunque no cura mágicamente la enfermedad, pues cuando hay problemas de salud lo principal es acudir a un especialista para un diagnóstico oportuno y un tratamiento adecuado para situación y así poder evitar complicaciones, las investigaciones recomiendan el consumo de ciertos compuestos naturales que podrían ser útiles.

Todas las vitaminas son fundamentales para el cuerpo. | Foto: Peter Dazeley

Una de vitaminas sugeridas es la del grupo E, así como las llamadas antioxidantes, las cuales ayudan en la protección del hígado a través de la reducción o neutralización del daño que causa la inflamación, así como protege el tejido corporal del daño causado por sustancias llamadas radicales libres, que pueden dañar células, tejidos y órganos.

De acuerdo con Mayo Clinic, existe “cierta evidencia sugiere que los suplementos con vitamina E pueden ser útiles para las personas con daño hepático que causa la enfermedad del hígado graso no alcohólico. Pero la vitamina E se ha relacionado con un mayor riesgo de muerte y, en los hombres, un mayor riesgo de cáncer de próstata”.

Recomendaciones para evitar el hígado graso

A su vez, expertos del portal Mayo Clinic citaron algunas recomendaciones con el claro objetivo de ayudar a combatir esta afección:

  • Bajar de peso: “la reducción de calorías es la clave para perder peso y controlar esta enfermedad. Si has intentado perder peso antes, pero no has tenido éxito, pídele ayuda al médico”.
Elegir comer bien y saludable, incluyendo frutas, vegetales y granos integrales, es ideal para el buen funcionamiento del organismo. | Foto: Getty Images
  • Hacer ejercicio y ser más activo: hacer por lo menos 30 minutos de ejercicio, la mayoría de los días de la semana, trae grandes beneficios para la salud.
  • Controlar la diabetes: “sigue las instrucciones del médico para mantener la diabetes bajo control. Tomar los medicamentos como lo haya indicado el médico y supervisar constantemente el nivel de glucemia”.
  • Bajar el nivel de colesterol: “una dieta saludable con base en vegetales, actividad física y medicamentos puede ayudarte a mantener un nivel saludable de colesterol y triglicéridos”.