De acuerdo con la National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases, el estreñimiento es una afección en la cual una persona se ve con la dificultad de evacuar de manera fácil, y esto se debe a que las heces son grumosas y secas.

Muchas son las prácticas que pueden contrarrestar el estreñimiento, sin embargo, se aconseja consultar con un médico antes para poder tratarlo, ya que cualquier persona -incluido los bebés- se ven afectados.

No obstante, una dieta no saludable es uno de los factores principales para padecer de estreñimiento, en la que se incluyen grasas saturadas, trans, y una alta ingesta de carbohidratos y bebidas como el alcohol y/o las gaseosas.

“La OMS recomienda que la ingesta de grasas trans se limite a menos del 1% de la ingesta calórica total, lo que se traduce en menos de 2,2 g/día en un régimen alimentario de 2000, calorías”, asegura la Organización Mundial para la Salud.

Es por esto que incluir en un plan de alimentación frutas y verduras como la papaya, es ideal para una buena digestión.

La papaya en ayunas

El portal de salud Tua Saúde asegura que la papaya es una fruta rica en agua y fibra, dos componentes que la destacan como uno de los mejores laxantes.

Al estar compuesta de vitamina A, C y E ayuda a disminuir las probabilidades de riesgo de padecer alguna enfermedad como el cáncer. Lo anterior no quiere decir que elimine el riesgo, sino que lo disminuye porque en el desarrollo de cualquier enfermedad se ven implícitos, otros aspectos como los genéticos, por ejemplo.

Quienes consumen papaya pueden verse beneficiados tras la disminución de colesterol, “una sustancia cerosa” que se adhiere en las paredes de las arterias, impidiendo el flujo de sangre provocando afecciones sobre el corazón, por lo que la papaya ayuda a absorber este lípido del organismo.

Durante la digestión se pueden acumular gases en el organismo. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Otros de los efectos que más se destacan de la papaya es su participación para un buen tránsito intestinal, en donde una de sus enzimas como la papaína influyen en el proceso de digestión de las carnes, explica el sitio web mencionado.

Entre tanto, esta fruta al tener un bajo índice calórico puede ayudar en la pérdida de peso, no porque por sí sola queme grasa, sino que al ser nutritiva y no aportar calorías contribuye con este fin.

La papaya es uno de los alimentos más consumidos en el desayuno gracias a sus propiedades que actúan sobre los alimentos digeridos. Además, aumenta la sensación de llenura, misma que ayuda a evitar el consumo excesivo de alimentos que el cuerpo en su momento no necesita.

Las semillas de papaya favorecen el funcionamiento del hígado. En casos de cirrosis hepática, pueden funcionar como un tratamiento alternativo. | Foto: Getty

Licuado de papaya y limón

Por último, un artículo publicado por Mejor con Salud, y escrito por Carolina Betancurth, precisa que el limón y la papaya pueden ser la pareja perfecta para desintoxicar el estómago y facilitar el proceso de digestión.

Modo de preparación:

  1. Pelar la papaya y picarla en trozos.
  1. Agregar en la licuadora zumo de limón y papaya picada junto con 250 ml de agua.
  1. Licuar hasta que la mezcla quede homogénea.
  1. Consumir.

Cabe recordar que ninguna receta medicinal remplaza los tratamientos prescritos por un médico, por lo que se recomienda seguirlos al pie de la letra.

Por último, el limón es una fruta que tiene propiedades antioxidantes que también puede contribuir en la digestión de los alimentos. Adicional a esto, es rico en vitamina C que contrarresta enfermedades como el virus de la gripe.

Al igual que la papaya, ayuda en la pérdida de peso, ya que es rico en fibras y tiene un bajo valor calórico. Asimismo, combate el estreñimiento, puesto que ayuda al tracto digestivo con el tránsito de la materia fecal.