Las frutas son importantes componentes de una dieta saludable y su consumo ayuda a prevenir diversas enfermedades como las cardiopatías, el cáncer, la diabetes y la obesidad, por lo que su ingesta diaria debe ser una prioridad.
Una de las más recomendadas debido a su composición nutricional es la guayaba. Se caracteriza por ser fuente de fósforo, niacina, potasio, vitaminas A y B, hierro, calcio y ácido fólico. Una de sus fortalezas es la riqueza en vitamina C.
Según el portal Tua Saúde, sus componentes le otorgan propiedades antioxidantes, antidiabéticas, antihipertensivas, antiinflamatorias, analgésicas, hipocolesterolémicas, antiespasmódicas, antimicrobianas y astringentes.
El consumo regular de esta fruta ayudaría, entre otras cosas, a regular la presión arterial, controlar los niveles de azúcar en la sangre y reducir el colesterol, afecciones que son factores de riesgo para la salud del corazón.
Por ser una fruta rica en fibras solubles, la guayaba ayuda en la reducción de lípidos como el colesterol. Este tipo de fibras facilitan la eliminación de esta grasa a través de las heces y al reducir su absorción se disminuye su cantidad en la sangre, precisa la citada fuente. Además, su aporte de antioxidantes también ayudaría a reducir el colesterol LDL “malo” y aumentar el bueno.
Contra la diabetes
Uno de los indicadores que se miden para saber si la persona tiene diabetes, o prediabetes, es el nivel glucémico. Si se encuentra por encima de 100 miligramos por decilitro, entonces hay riesgo de padecer esta afección, explica el portal Nutrición y Farmacia. Es por eso que se recomienda el consumo de guayaba, la cual permite reducir estos niveles.
Este sitio web hace referencia al ‘Estudio hipoglicemiante de los extractos acuoso y etanólico de Psidium guajava L. (Guayaba) en ratas diabéticas inducidas por aloxano’, en el cual se determinó que pasados 10 días desde la administración del tratamiento, los índices glucémicos disminuyeron.
De igual forma, se dice que esta fruta aumenta la producción de insulina, hormona que se encarga de permitir el paso de la glucosa a las células para que estas la conviertan en energía. La revista Mejor con Salud cita una investigación realizada por el All India Institute of Medical Sciences, en la que se destacan las bondades del jugo de esta fruta para controlar la diabetes y sugiere que debe prepararse con la fruta sin piel. Se le pueden agregar hojas de la planta.
Tanto la fruta como las hojas del guayabo sirven para tratar este padecimiento de forma natural. En este sentido, una investigación publicada en la revista Nutrition and Metabolism concluyó que el extracto de hoja de guayaba puede reducir los niveles de glucosa en la sangre después de las comidas.
Regula la presión arterial
Por ser rica en antioxidantes, específicamente polifenoles, la guayaba ayuda a mantener la presión arterial bajo control, pues favorece la relajación de los vasos sanguíneos y mejora la función vascular. De igual forma, aporta potasio, un mineral que favorece la excreción de sodio a través de la orina, ayudando también en el propósito de prevenir la hipertensión.
De otra parte, este fruto es rico en fibras, por lo que es bueno para la digestión y su jugo previene el desarrollo de problemas gastrointestinales. También, en ocasiones, funciona contra la diarrea, ya que posee propiedades que ayudan a disminuir tanto la diarrea (aguda o crónica), como el dolor abdominal, precisa información del portal Buen Provecho.
Cuando se come cruda y se ingiere con cáscara también ayuda a combatir la acidez estomacal, siendo un buen complemento en un tratamiento de úlceras gástricas y duodenales, asegura Tua Saúde.
El elevado contenido en vitamina C hace que la guayaba, también resulte beneficiosa a la hora de prevenir resfriados, siendo eficaz, además, para evitar la anemia ferropénica, ya que esta vitamina resulta esencial en la absorción del hierro, asegura el portal de estilo de vida unCOMO.
Es importante tener claro que si bien se trata de un producto natural que le ofrece diversos beneficios al organismo, no es un alimento milagroso, sino que sus aportes saludables se consiguen en el marco de una dieta equilibrada en la que no falten las verduras y las frutas, así como proteínas magras y cereales integrales. Esto acompañado de la práctica regular de ejercicio.