Un factor muy importante para la salud de las personas es la presión arterial, que se define como la medición de la fuerza ejercida contra las paredes de las arterias a medida que el corazón bombea sangre al cuerpo. Cuando esta fuerza es alta, se empieza a desarrollar la llamada hipertensión.
La presión arterial o la tensión elevada suele ser un padecimiento que se presenta con frecuencia en pacientes con avanzada edad; no obstante, en la actualidad es frecuente también en pacientes jóvenes, debido a que son personas que suelen llevar una vida sedentaria y abusan de la ingesta de sal o del consumo de productos o alimentos ultraprocesados, que cuentan con cantidades desmedidas de sodio.
Esta afección puede parecer inofensiva, pero a medida que crece puede llevar a otros problemas de salud como enfermedades del corazón, accidentes cerebrovasculares, insuficiencia renal, problemas en los ojos y otro tipo de afecciones.
Una parte muy importante de este problema es que, en la mayoría de los casos, no se registra ningún síntoma, por lo que las personas la detectan durante visitas al médico. La OMS calcula que el 46 % de los adultos hipertensos desconoce su padecimiento. Además, este padecimiento se diagnostica y trata a menos de la mitad de los adultos que lo presentan.
Por esto, es importante mencionarle al médico de confianza si se tiene un familiar cercano que padezca o haya padecido en el pasado de presión arterial, para que él lo tenga en cuenta y haga las apreciaciones pertinentes con el objetivo de diagnosticar la enfermedad a tiempo en dado caso de que se presente.
La importancia del consumo de tomate de árbol
Una alimentación saludable es fundamental para poder enfrentar la alta presión arterial. Son muchos los estudios que han demostrado que el tomate cuenta con importantes propiedades que ayudarían a las personas que sufren de hipertensión, por lo que se aconseja consumir tomate frecuentemente en sus diferentes presentaciones, especialmente en jugo.
El tomate de árbol se cataloga como un fruto de amores y odio entre las personas. Desprende un aroma muy agradable y en su interior se encuentran las semillas envueltas en una capa gelatinosa con un sabor dulce muy destacado. No obstante, son muchas las personas que no conocen sus beneficios.
Según se menciona en los datos obtenidos de la obra Tropical Plant Species and Technological Interventions for Improvement, la composición nutricional por cada 100 gramos de este fruto fresco es la siguiente: proteína: 1.6 gramos, grasas: 0.0 gramos; carbohidratos: 11.90 gramos y fibra: 6 gramos.
Por otro lado, el portal Mundo Deportivo menciona que, aparte de reducir el colesterol alto, el tomate ayuda a bajar la tensión arterial y recibir una buena dosis de vitaminas, algo que ayuda a mejorar la salud cardíaca y favorece el sistema inmunológico.
Esta reconocida fruta contiene ácido gamma aminobutírico, el cual es bueno para bajar la presión arterial, pues cuando una persona tiene hipertensión (o tensión arterial alta) se incrementa de manera significativa el riesgo de sufrir cardiopatías, encefalopatías, nefropatías y otras enfermedades.
El tomate de árbol es rico en sodio y potasio, dos electrolitos necesarios para un correcto funcionamiento del organismo, especialmente en referencia al sistema cardiovascular. Sus actividades están relacionadas, pero ejercen funciones diferentes.