Una característica tras la menopausia, es decir, cuando las mujeres dejan de tener su periodo menstrual, es la disminución de las hormonas progesterona y estrógeno. Pero no es la única, también aumentan los niveles de colesterol total y LDL, de acuerdo con portales como Healthline, de ahí la necesidad de tener hábitos de vida saludables y una dieta balanceada.
Después de la menopausia es común que aumente la acumulación de grasa visceral, productora de sustancias inflamatorias que son factor de riesgo, afecciones en salud como la hipertensión, la cardiopatía y el colesterol anormal. Sin embargo, hay una fruta, a veces subestimada, que puede resultar una buena fórmula para tratar no solo esta, sino otras condiciones: la ciruela pasa.
La revista Food&Function hizo eco de una investigación de la Royal Society of Chemistry del Reino Unido que deja en evidencia cómo el consumo de uva en mujeres posmenopáusicas “puede mejorar el microbiota fecal intestinal en ellas”.
Lo que la investigación llamaba microbiota fecal no es más que el número de microorganismos en la materia fecal, que, a su vez, dan cuenta del estado del intestino.
Pues bien, lo que demostró la Royal Society of Chemistry es el hallazgo de una bacteria llamada Lachnospiraceae, que contribuye con la disminución de sustancias inflamatorias en el cuerpo, y, además, se relaciona con una barrera intestinal sana. En ese contexto es que, a las mujeres mayores de 50 años se les recomendó el consumo de 50 gramos de uvas pasas al día.
Acerca de ello, Andrea N. Giancoli, asesora de nutrición de California Prune Board, citada por el portal Sabervivirtv comentó: “Los consumidores están cada vez más preocupados por su salud intestinal y este estudio respalda la reputación de las ciruelas pasas como un alimento saludable para el intestino. Las ciruelas pasas son un alimento integral natural que es fácil y conveniente para que los consumidores las incorporen a sus comidas o meriendas diarias”.
Pero las ciruelas pasas también tienen otras bondades para el cuerpo. A continuación, algunas de ellas:
Para la osteoporosis y la masa muscular
De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, la ciruela pasa sirve para contribuir con el aumento de la masa muscular, información sustentada en algunos estudios. Una investigación realizada por la Universidad Estatal de Oklahoma evidenció que ayuda en la producción de la IGF-1, fundamental en el crecimiento de los tejidos y los huesos del cuerpo.
En cuanto a su efectividad en el tratamiento para la osteoporosis, obedece a sus aportes en fibra y antioxidantes a quienes la consumen.
El Journal of Medicinal Food informó que las ciruelas pasadas también son efectivas en mujeres posmenopáusicas, en especial quienes consumieron entre 6 y 8 ciruelas pasas, aunque no se especificó concretamente en qué.
Para bajar de peso
Las ciruelas pasas también sirven para bajar de peso, pues generan sensación de saciedad, y ayudan a reducir el azúcar. Gracias al sorbitol que contiene, puede contribuir a que el cuerpo absorba con mayor lentitud la glucosa. Entretanto, debido a la pectina, ayuda a reducir el colesterol.
Las ciruelas pasas, que algunos quizá dejan de lado, además aporta vitamina C, nutriente que beneficia los vasos sanguíneos, y la vitamina K, pieza clave en la coagulación.
Neutralizan la acidez del PH
La acidosis es un estado en el que el pH de la sangre disminuye, algo bastante negativo, pues pueden afectar notablemente a órganos del cuerpo. Además, pueden aparecer con más frecuencia tumores, enfermedades inflamatorias, artritis, enfermedades de la piel o incluso, cáncer.
Por fortuna, las uvas pasas y su gran contenido en magnesio y potasio servirán para neutralizar el desarrollo de estos ácidos y gozar de una salud de hierro.