Por medio de la alimentación, el cuerpo adquiere los nutrientes y vitaminas que necesita para su buen funcionamiento; por esto los profesionales de salud manifiestan la importancia de escoger bien lo que se va a ingerir a diario.
Las enfermedades más diagnosticadas en pleno siglo XXI son la diabetes, la presión arterial elevada y el sobre peso u obesidad. Varias de ellas son diagnosticadas durante el envejecimiento; es decir, en pacientes de avanzada edad. Sin embargo, hoy en día es frecuente que jóvenes e incluso adolescentes sean diagnosticados con este tipo de patología; en su mayoría, se debe a los malos hábitos alimenticios y al sedentarismo.
La diabetes es catalogada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una enfermedad crónica. Cuando un paciente es diagnosticado con dicha patología, quiere decir que sus niveles de glucosa (azúcar) en la sangre se encuentran elevados. Ese padecimiento puede surgir por factores hereditarios y genéticos o a causa del sedentarismo y una alimentación cargada de alimentos azucarados.
Por su parte, cuando una persona padece de hipertensión, quiere decir que su presión arterial se encuentra por encima de los índices normales. Para diagnosticar este padecimiento se necesitan chequeos médicos regulares, debido a que esta enfermedad, por lo general, no presenta síntomas. Por esto es conveniente ir al médico cada vez que lo indique, más cuando ya se ha llegado a la etapa del envejecimiento.
Beneficios de la ingesta de arándanos azules
El portal de salud, belleza y cuidado personal unComo indica que los arándanos son una fruta con un alto contenido de nutrientes y antioxidantes que ayudan a prevenir y tratar las enfermedades mencionadas anteriormente, siempre y cuando se consuman dentro de un plan de alimentación sano y equilibrado que incluya la práctica de actividad física frecuente.
Cabe mencionar que el consumo de este alimento no reemplaza la ingesta de medicamentos estipulados por el profesional de la salud para tratar algunas de las afecciones mencionadas a continuación; a su vez, es pertinente seguir las recomendaciones al pie de la letra del médico tratante.
Antes de consumirlo se recomienda contar con la aprobación de un profesional de la salud, ya que algunos compuestos de los arándanos inhiben el efecto de medicamentos que tratan la artritis y el cáncer; a su vez, están contraindicados en pacientes que consumen anticoagulantes o antibióticos.
- Reduce la presión arterial: los arándanos azules tienen una gran cantidad de un componente al que se conoce como antocianinas. “Estos son fitoquímicos con propiedades antioxidantes y antihipertensivas, que actúan en el organismo para mejorar la función del endotelio, unas células que recubren la superficie interior de los vasos sanguíneos”. Lo anterior indica que regulan el flujo sanguíneo y controlan la presión arterial.
- Controla los niveles de azúcar en la sangre: esta fruta contiene compuestos bioactivos que tienen propiedades antidiabéticas; por ende, reducen los niveles elevados de azúcar en la sangre y mejoran la sensibilidad a la insulina. El medio indica que se recomienda el consumo de arándanos para prevenir y tratar sobre todo la diabetes tipo 2.
- Ayudan a bajar de peso: este alimento puede ser involucrado en el plan de alimentación de una persona que está en proceso para bajar de peso; esto, gracias a que es bajo en calorías, rico en fibra y tiene un alto contenido de agua. Este es un alimento ideal para consumir entre comidas o como snack.