Para nadie es un secreto que el tamarindo es uno de los frutos más refrescantes que existen. Si bien puede ser consumido crudo o utilizarse para preparar jugos, dulces y otras bebidas, como licores, pocas personas conocen sus beneficios para la salud.
En concreto, es una fruta tropical que se caracteriza por un sabor ácido, un elevado aporte calórico y ser rica en vitaminas A y C, minerales, fibras y antioxidantes. Además, previene el surgimiento de enfermedades cardíacas, fortalece el sistema inmune, ayuda a prevenir el envejecimiento prematuro de la piel y cuida la salud visual, según el portal especializado en salud Tuá Saudé.
Adicionalmente, es rico en fibra. Por eso, tomar zumo en altas concentraciones tendrá un efecto laxante que ayuda a depurar el organismo.
Es ideal para las personas con problemas diuréticos, ya que facilita la eliminación de la orina, según el portal Nutrición y Farmacia.
Beneficios del tamarindo para la salud
- Previene el envejecimiento precoz: aporta antioxidantes que evitan el daño que causan los radicales libres a las células.
- Tiene propiedades antiinflamatorias y analgésicas: inhibe varios procesos biológicos involucrados en la inflamación y, en el caso del dolor, activa los receptores opioides. Esto podría ser beneficioso para tratar enfermedades inflamatorias, reumatismo, dolor de estómago y de garganta.
- Cuidar la salud visual: aporta vitamina A, previniendo la degeneración macular y las cataratas.
- Fortalece el sistema inmune: da vitamina C y A, y ambos son micronutrientes importantes para aumentar y estimular las células de defensa del organismo.
- Mejora la salud gastrointestinal: es beneficioso tanto para las personas con estreñimiento como para tratar disentería y diarrea, gracias a que contiene gomas y pectinas, así como otros componentes que pueden ayudar en el tratamiento de estos problemas.
- Favorece la cicatrización: contiene vitamina C, vitamina A y propiedades antiinflamatorias que favorecen la regeneración de la piel.
- Aumenta peso: en personas que tienen bajo peso, gracias a su aporte calórico, no solo aporta energía, también aminoácidos esenciales, por lo cual también aporta proteínas.
- Ayuda a reducir el colesterol “malo” LDL: contiene antioxidantes que favorecen su disminución, cuidando la salud del corazón, previniendo el surgimiento de enfermedades cardiovasculares.
- Ayuda a controlar la diabetes: sirve cuando se ingiere en pequeñas porciones, esto ocurre debido a que posee actividad hipoglucemiante. Incluso, se cree que podría ser gracias a sus fibras que reducen la absorción de azúcar en el intestino.
¿Cómo consumirlo?
El tamarindo se puede tomar en jugo y se elabora agregando a la licuadora, medio litro de agua, cuatro cucharadas de pulpa de tamarindo (sin semillas), se mezcla, se cuela y se agrega dulce y un poco de hielo si se desea y estará listo para consumir.
También se puede preparar infusión con las hojas y con las flores. La primera ayuda a tratar problemas de hemoglobina, dice Nutrición y Farmacia. Se pone a hervir una taza de agua, se agregan dos cucharadas de hojas de tamarindo y se deja durante 10 minutos. Luego se apaga el fuego, se deja reposar, se cuela y se bebe. La preparación para el caso de las flores es similar.
Si bien son múltiples los beneficios que puede ofrecer el consumo regular de esta fruta, siempre es importante tener claro que no se trata de una medicina, sino de un alimento complementario que ayudaría en el marco de una dieta balanceada y la práctica de ejercicio. Además, es clave consultar al médico sobre su ingesta y los efectos que podría tener si se quiere usar para aliviar algún malestar específico.