La presión arterial es la fuerza que la sangre ejerce contra las paredes arteriales, de acuerdo con el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento, que hace parte de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés).

Sobre la misma línea, el Grupo Sanitas de España explicó que se define la frecuencia cardiaca como las veces que el corazón realiza el ciclo completo de llenado y vaciado de sus cámaras en un determinado tiempo.

Así las cosas, la Agencia Peruana de Noticias Andina reveló que la granadilla es ideal para regular la presión arterial y el ritmo cardiaco, pues fomenta el desarrollo de glóbulos rojos, blancos y plaquetas.

Adicional, la granadilla es una fruta originaria de América del Sur y del Norte que tiene muchos nutrientes, pues aporta fibra, potasio, calcio, fósforo, hierro, vitaminas A, B1, B2, B3, B9, C, E, K y la provitamina A. Por lo general esta fruta se consume cruda, pero también se puede ingerir en forma de jugo, helado, pasta, yogurt, entre otras.

Valor nutricional por 100 gramos de granadilla

  • Calorías: 97
  • Carbohidratos: 23,4 gr
  • Sodio: 28 mg
  • Agua: 72,23 ml
  • Proteína: 2,20 gr
  • Vitamina A: 1272 IU
  • Vitamina C: 30 mg
  • Vitamina B3: 1,5 mg
  • Vitamina B9: 14 mg
  • Calcio: 12 mg
  • Hierro: 1,60 mg
  • Potasio: 348 mg
  • Fósforo: 68 mg
  • Sodio: 28 mg

De todos modos, antes de consumir la fruta, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.

Por su parte, hay otras formas regular la presión arterial y cuidar el ritmo cardiaco como, por ejemplo:

1. Seguir una alimentación balanceada y saludable: esto es bueno para el cerebro, el corazón y el cuerpo. Además, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, recomienda comer frutas, verduras y granos integrales, así como elegir fuentes de proteína bajas en grasa, como pescado, fríjoles y carne de pollo sin piel.

2. No fumar: el hacerlo aumenta el riesgo de morir de enfermedades del corazón y de los vasos sanguíneos (cardiovasculares), que incluyen ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.

3. Tener un peso saludable: el Ministerio de Salud en su página web explicó que se considera un peso saludable aquel que permite que la persona se mantenga en un buen estado de salud y calidad de vida. También se entiende como los valores de peso, dentro de los cuales, no existe riesgo para la salud de la persona.

Además, indicó que para saber si una persona está en un peso saludable, existen algunos métodos confiables. Uno es la determinación del Índice de masa corporal (IMC), que describe la relación entre peso y estatura y para calcular el IMC se necesita conocer el peso y la estatura y se aplica una sencilla fórmula matemática que consiste en dividir el peso entre la estatura al cuadrado: IMC = Peso (Kg)/ estatura al cuadrado (Mt).

Ejemplo: una persona pesa 64 Kg y mide 1,5 metros: 64/1,5 x 1,5 = 28,44. Este dato indica el IMC de la persona (28.44) se encuentra en los valores correspondientes a sobrepeso.

4. Hacer ejercicio: las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS), recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana, para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad, y un promedio de 60 minutos al día para los niños y adolescentes.