Los triglicéridos son moléculas de grasa que se encuentran en la sangre, cuyo aumento y acumulación en el organismo se debe al exceso de alimentos ricos en azúcares, grasas y bebidas alcohólicas.
Algo que hay que tener muy presente es que los niveles altos de triglicéridos (hipertrigliceridemia) se consideran un factor de alto riesgo para el estrechamiento de las arterias (aterosclerosis). Esto puede causar un accidente cerebrovascular, un ataque cardíaco y la enfermedad arterial periférica (EAP).
Además, si los niveles de triglicéridos son altos, la persona podría estar en alto riesgo de pancreatitis (inflamación del páncreas) y enfermedad hepática, según el magacín de salud Healthline.
Los triglicéridos almacenan las calorías no utilizadas y proporcionan energía al cuerpo, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación. De acuerdo con los expertos de este portal, tener un nivel alto de triglicéridos en la sangre puede aumentar el riesgo de padecer una enfermedad cardíaca.
Es importante tener presente que la única forma de conocer los niveles de colesterol es a través de exámenes de sangre y, si se llegan a tener altos, hay que tener cambios en el estilo de vida para reducirlos. De hecho, una recomendación del Diario de Sevilla es consumir diente de león, ya que sus propiedades bajan los niveles y protegen las arterias.
Además, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde reveló que “las sustancias bioactivas naturales del diente de león contienen propiedades hipocolesterolémicas y antioxidantes, que son efectivas para prevenir la formación y/o progresión de la aterosclerosis”.
El portal web agregó que “las investigaciones han comprobado que las hojas de diente de león ayudan a evitar el daño oxidativo de las células y a disminuir los niveles de triglicéridos y de colesterol LDL, llamado el colesterol ‘malo’, así el desarrollo de enfermedades cardiovasculares y de contraer un accidente cerebrovascular”.
Para preparar el té hay que hervir una taza de agua y agregar una o dos cucharitas de la raíz de diente de león triturada o en polvo que se deja reposar durante 10 minutos para, finalmente, colar y beber tibio hasta tres veces al día.
No obstante, el portal portugués puntualizó que “aunque es raro, el diente de león puede provocar trastornos gastrointestinales o reacciones alérgicas en personas sensibles, por los componentes alergénicos como el ácido taraxínico y lactona sesquiterpénica”.
Por tal razón, antes de consumir algún alimento, lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todos, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.
Hábitos que se deben seguir para bajar los niveles de los triglicéridos:
Tener una dieta saludable: esta debe incluir al menos 400 g (o sea, cinco porciones) de frutas y hortalizas al día; menos del 10 % de la ingesta calórica total debe ser de azúcares libres, menos del 30 % de la ingesta calórica diaria debe proceder de grasas y se deben consumir menos de cinco gramos de sal (aproximadamente una cucharadita) al día y la sal debería ser yodada.
No fumar: ya que este hábito daña casi cada órgano del cuerpo y sistema de órganos del cuerpo y disminuye la salud general de la persona, según el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos.
Hacer actividad física, ya que moverse y sudar contribuye con la eliminación de toxinas: lo ideal es realizar actividades físicas aeróbicas moderadas durante al menos 150 a 300 minutos o actividades físicas aeróbicas intensas durante al menos 75 a 150 minutos, o una combinación equivalente de actividades moderadas e intensas a lo largo de la semana.
Limitar la cantidad de alcohol que se bebe y de acuerdo con la biblioteca: para los adultos sanos, esto significa hasta una copa por día para las mujeres de todas las edades y para los hombres mayores de 65 años, y hasta dos copas por día para los hombres menores de 65 años.