Los gases estomacales, también conocidos como flatulencias, se generan como consecuencia del ingreso de aire a través de la boca y también es posible que se desarrollen en el proceso de digestión de los alimentos, según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
En ocasiones este padecimiento se genera después de ingerir bastante alimento o cuando la persona habla mucho mientras come. El instituto Mayo Clinic asegura que la presencia de gases en el sistema digestivo es normal, como también lo es la eliminación mediante los eructos o la flatulencia. Hay personas que experimentan dolor si los gases están atrapados o no se mueven con facilidad por los intestinos.
Hay casos en los que la alimentación tiene mucho que ver, pues hay productos propensos a ocasionar esta molestia. En la mayoría de oportunidades, dicen los especialistas, cambios simples en los hábitos alimenticios ayudan a disminuir su presencia.
“Algunos trastornos del sistema digestivo como el síndrome del colon irritable o la celiaquía pueden causar, entre otros signos y síntomas, un aumento de la cantidad de gases o del dolor que se produce por estos”, asegura Mayo Clinic.
La distensión abdominal, los ruidos intestinales, las ventosidades y, en algunas oportunidades, el dolor, son las principales señales del exceso de gases en el estómago. Si estos signos se presentan de manera recurrente, es importante visitar al médico para determinar si se requiere de algún tipo de tratamiento.
Los beneficios de la albahaca
Cuando las flatulencias se presentan de manera ocasional y no generan síntomas mayores, es posible acudir a la ingesta de productos naturales que ayudan a aliviarlos. Uno de ellos es el té de albahaca, una hierba medicinal que tradicionalmente ha sido utilizada para mejorar la digestión.
Se le atribuyen propiedades carminativas, antiespasmódicas, antiinflamatorias, diuréticas, analgésicas, antisépticas, antibacterianas, insecticidas y cicatrizantes.
En cuanto al proceso digestivo, la albahaca ayuda a aliviar la pesadez estomacal, los espasmos gastrointestinales y las náuseas. El portal de bienestar y salud Tua Saúde asegura que gracias a sus bondades antiespasmódicas, esta hierba ayuda en la prevención de cólicos y dolores estomacales. Asimismo, combate el exceso de gases.
En este sentido, una publicación de la revista Mejor con Salud indica que hay diversos estudios que han encontrado que la albahaca puede relajar los músculos del tracto gastrointestinal, de manera que se constituye en una ayuda frente a problemas como el estreñimiento y la diarrea.
Otras bondades
Esta planta ligeramente amarga y picante también sirve para estimular los jugos gástricos y despertar el apetito. Culturalmente, se recomienda para niños y adolescentes que no encuentran interés por la comida, así como para personas mayores.
Otra de las bondades que se le atribuyen es que estimula la función renal, debido a que tiene cierto efecto diurético. Además, sus propiedades antiinflamatorias pueden aportar al buen funcionamiento de los riñones.
Se dice que gracias a su contenido de antioxidantes ayudaría a prevenir el envejecimiento celular prematuro y a proteger los tejidos frente al deterioro ocasionado por los radicales libres, evitando la pronta aparición de signos de la edad.
Por último, serviría para estimular la micción. Una infusión de albahaca puede ayudar a la persona a mantenerse hidratada y a estimular la micción, lo cual contribuiría con la eliminación de líquidos retenidos y molestias asociadas.
¿Cómo preparar una infusión de albahaca?
Precisamente, la infusión es una de las mejores formas de aprovechar sus propiedades. Para prepararla solo se requiere una taza de agua y de cinco a ocho hojas de albahaca frescas o secas. Se pone el agua al fuego hasta que llegue a ebullición, luego se retira y se agregan las hojas, se deja reposar, se cuela y se consume. Se le puede adicionar el zumo de un limón y miel si la persona lo desea.
Si bien se trata de un producto natural y la albahaca es considerada una planta segura, su consumo no debe ser exagerado debido a que es posible que ocasione inconvenientes de salud como problemas gástricos. Lo mejor es siempre consultar con el médico antes de realizar una ingesta regular.