De acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, el azúcar en la sangre, también llamada glucosa, es el azúcar principal que se encuentra en el torrente sanguíneo y proviene de los alimentos que se consumen, además, es la principal fuente de energía.
Asimismo, por lo general, las personas consumen más azúcar de lo que se cree, pues muchos alimentos la contienen de una forma secreta y esto puede aumentar el riesgo de padecer diabetes tipo 2, una enfermedad crónica (de larga duración) que afecta la forma en que el cuerpo convierte los alimentos en energía.
De igual manera, es necesario destacar que son muchas las hierbas que presentan un alto contenido de propiedades medicinales y, por ello, es común que las personas consuman o hagan infusiones con estos elementos para prevenir o tratar alguna determinada enfermedad.
En este sentido, hay una planta en especial que presenta diferentes propiedades para el cuerpo humano y una de estas es que ayuda a bajar la glucosa y equilibra la misma en la sangre, por lo cual, es apropiada para prevenir la diabetes.
Con respecto a lo anterior, según el portal Cuerpo Mente, esta hierba es la judía, con la cual se han realizado una gran cantidad de estudios, estos han comprobado que la misma contribuye de forma notable para disminuir los niveles de glucosa en la sangre, al tiempo que puede incrementar los de insulina.
Por lo tanto, esta hierba es adecuada para prepararla en infusiones y consumirla de manera regular para evitar padecer de diabetes o tratar la misma enfermedad. También, es oportuno resaltar que la judía es buena para la hipertensión y las infecciones urinarias.
Aunque esta planta no presenta algún tipo de toxicidad, es recomendable que las personas que deseen consumirla consulten con un médico para despejar cualquier duda según su salud.
Cinco síntomas poco conocidos de la diabetes
Alteración en la visión
Aunque esta enfermedad altera los fluidos corporales, entre estos la visión, algunos diabéticos, antes de ser diagnosticados, pueden ver bien y por eso dejan de usar gafas. No obstante, una vez la glucosa está regulada van a necesitarlas de nuevo.
Sin embargo, ello no se debe a una retinopatía diabética, una enfermedad que genera la obstrucción de los vasos sanguíneos de la parte trasera de los ojos.
Irritaciones cutáneas
Si la persona empieza a notar picor o irritación en la piel, debe establecer si se debe al clima u otros factores o, de lo contrario, deberá adelantar un análisis de sangre para ver los niveles de glucosa.
El portal Econcejos destaca que la diabetes alcanza a la circulación de la sangre y por ello las extremidades son las más propensas a la irritación.
Ronquidos
Los ronquidos pueden ser síntomas de muchas enfermedades, entre estas la diabetes. Por lo tanto, las personas experimentan intervalos respiratorios, debido al relajamiento de los músculos, encogiendo las vías respiratorias.
Asimismo, debido a los ronquidos, se termina perjudicando la entrada de aire en los pulmones, generando que se detenga el metabolismo de la glucosa.
Cuero cabelludo o caspa
Cuando hay demasiada azúcar en la sangre, el organismo trata de liberarla a través de la orina pero, si se elimina demasiada, algunas partes del cuerpo se deshidratan, lo que genera escamas en el cuero cabelludo y caspa (dermatitis seborreica).
Problemas de audición
Si la persona empieza a ver que necesita aumentar el volumen del televisor o de la radio, ello es una alarma de que puede estar padeciendo diabetes, pues está perdiendo paulatinamente audición.
De hecho, algunas investigaciones señalan que, aquellas personas que tiene más azúcar en la sangre, corren mayor riesgo de tener daños auditivos que otras, debido a que la elevada glucosa provoca daños en los vasos sanguíneos y en los nervios del oído interno.