El colágeno es una de las proteínas más abundantes en el cuerpo y es el componente principal de los tejidos conectivos que conforman varias partes de la estructura corporal, incluyendo los tendones, los ligamentos, la piel y los músculos.
Una de las principales bondades que se le atribuyen a este producto es que juega un papel importante en el fortalecimiento de la piel, y además puede beneficiar la elasticidad y la hidratación, según el portal especializado en salud Healthline.
Sin embargo, con el paso del tiempo el organismo va perdiendo esta sustancia y no tiene la misma capacidad para regenerarla. Según el portal Vivir Mejor TV, el cuerpo contiene unas células que elaboran esta proteína con la ayuda de aminoácidos que el organismo obtiene a través de la comida.
Los avances en la edad hacen que estas células ralenticen su capacidad de sintetizar el colágeno y como consecuencia empiecen a aparecer problemáticas tanto a nivel estético, que se evidencian en la piel, como internas que derivan en inconvenientes de salud.
Existen varias maneras de obtener colágeno. Además de la alimentación, los trucos caseros pueden resultar muy útiles. Uno de ellos es el uso de un tónico elaborado a partir de la cola de caballo, una planta medicinal muy conocida por sus propiedades diuréticas y depurativas, pero que además de ser beneficiosa para la salud, es muy bondadosa con la piel.
Es regeneradora, astringente, antibacteriana, reafirmante y rejuvenecedora, por lo que es recomendada como una de las mejores hierbas para mejorar el aspecto de la piel, combatir los signos de envejecimiento y tratar ciertas afecciones cutáneas de manera natural.
El portal español Nutrición y Farmacia indica que la cola de caballo ayuda a mejorar el cabello, las uñas y la piel. Cuando se usa en loción o masaje, contribuye a la regeneración del cuello cabelludo, previene la caída del cabello y combate la caspa. Además, coadyuva en la formación de colágeno, clave para minimizar la apariencia de las arrugas.
Sus antioxidantes, sílice y ácidos de sílice luchan contra la acción de los radicales libres, principales causantes el envejecimiento celular, por lo que promueven la producción de colágeno naturalmente para que la piel se mantenga sana y sin signos de la edad, indica el portal Panorama Web.
Para obtener el colágeno de esta planta solo se requiere preparar una infusión. Para ello se necesita un puñado de hojas de cola de caballo, cuatro tazas de agua y una toalla limpia. Primero, se debe realizar una prueba de alergia y si no hay una reacción adversa, se puede utilizar con seguridad en la piel del rostro.
Se prepara la infusión dejando que hierva durante unos 10 minutos y luego se deja reposar. Una vez lista, se humedece la toalla y se coloca sobre el rostro durante 20 minutos, dando un ligero masaje en las áreas en las que se noten más las arrugas y las líneas de expresión. Transcurrido este tiempo, se enjuaga la cara con agua tibia. se repite este procedimiento tres veces a la semana.
Otras bondades
La infusión de cola de caballo también es un remedio eficaz para la retención de líquidos. Gracias a que es diurética, la cola de caballo puede aumentar en un 30 % la secreción de orina. Debido a su contenido de sales de potasio, flavonoides y sapónidos, favorece el flujo urinario y por eso es recomendada para solucionar estos inconvenientes de salud, según Nutrición y Farmacia.
Dadas estas características, se utiliza con frecuencia como una alternativa para mitigar problemas genitourinarios, como los ocasionados por cálculos renales, cistitis, infecciones urinarias, inflamaciones de la vejiga y de la próstata.
Por otro lado, tiene propiedades antiinflamatorias, desintoxicantes y depurativas por lo que es recomendada como una solución natural para mediar en enfermedades reumáticas, artritis, artrosis y gota, pues ayuda a eliminar los excesos de ácido úrico y urea.